Por Bruno Cortés
Durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), la inflación ha alcanzado niveles que superan a los de sus predecesores, generando preocupación entre los mexicanos. A lo largo de los primeros cinco años de su administración, la inflación acumulada se ha disparado a un 32.94%, mientras que en el caso específico de la canasta básica, el incremento ha sido del 30.74%, lo que ha impactado directamente en los bolsillos de las familias. Estas cifras contrastan con las administraciones pasadas, donde la inflación acumulada fue menor. Por ejemplo, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, la inflación acumulada fue de 27.27%, en el de Felipe Calderón fue de 28.96% y en el de Vicente Fox de 30.43%.
Sin embargo, el gobierno de AMLO no ha enfrentado los mismos retos internacionales que sus antecesores, ya que no ha habido grandes choques externos como guerras o crisis financieras que pudieran justificar el aumento en la inflación. Entonces, ¿qué está pasando en México que ha llevado a este desbalance económico?
Causas detrás de la inflación
- Aumento de precios en alimentos:
El alza en los precios de la canasta básica ha sido un factor clave. Productos esenciales como el chayote han visto incrementos tan altos como 449.37%, reflejando la crisis en el sector agroalimentario. - Impacto del cambio climático:
Sequías y fenómenos como ‘El Niño’ han afectado gravemente la producción agrícola, lo que ha provocado escasez y, como consecuencia, precios más altos en los alimentos. - Inflación subyacente:
Aunque la inflación general ha mostrado fluctuaciones, la subyacente, que excluye alimentos y energéticos, ha mantenido una tendencia al alza, lo que indica que las presiones económicas se mantienen. - Políticas económicas insuficientes:
Programas como el Paquete contra la Inflación y la Carestía (PACIC) y los precios de garantía han sido calificados como ineficaces por muchos analistas, quienes señalan que no se ajustaron a las necesidades específicas de cada región. - Recuperación económica post-pandemia:
La recuperación tras el COVID-19 ha sido desigual. Muchas empresas y familias no recibieron el apoyo fiscal adecuado durante la pandemia, lo que afectó la estabilidad de precios y el consumo. - Presiones salariales:
Aunque el aumento en el salario mínimo ha sido positivo para el poder adquisitivo, también ha generado inflación, ya que las empresas han tenido que ajustar sus precios para compensar los mayores costos laborales.
Un desafío para la próxima administración
El panorama económico presenta grandes retos para la próxima administración, que deberá lidiar con una inflación que, de seguir esta tendencia, continuará afectando el poder adquisitivo de los mexicanos. Los analistas advierten que si no se toman medidas más efectivas para frenar esta alza, el país podría enfrentar una mayor inestabilidad económica en los próximos años.