Estados Unidos a 23 de febrero, 2024.- En un giro reciente que ha capturado la atención de ambos lados de la frontera, la Casa Blanca, a través del portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, ha declarado enfáticamente que no existe ninguna investigación en curso por parte de Estados Unidos sobre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y sus posibles vínculos con el narcotráfico. Esta declaración surge en medio de especulaciones y reportajes que han sugerido lo contrario, provocando una ola de reacciones políticas y mediáticas.
La controversia se intensificó tras la publicación de un reportaje por parte de The New York Times, que insinuaba la existencia de investigaciones sobre posibles relaciones entre narcotraficantes y personas cercanas al presidente mexicano. Sin embargo, Kirby ha reiterado la sólida relación entre los gobiernos de Estados Unidos y México, destacando la colaboración en asuntos migratorios y la importancia de abordar la situación en la frontera.
Además, el portavoz ha hecho hincapié en que el Departamento de Justicia ya había aclarado anteriormente que no hay una investigación abierta sobre López Obrador, desmintiendo así las acusaciones y enfatizando el deseo de Estados Unidos de continuar trabajando con el gobierno mexicano para enfrentar desafíos comunes.
Este episodio no solo ha generado un debate sobre la veracidad de las acusaciones y la integridad de las figuras políticas involucradas, sino que también ha puesto de manifiesto la delicada dinámica entre México y Estados Unidos, especialmente en temas de narcotráfico y seguridad fronteriza. La respuesta de López Obrador a las publicaciones, calificándolas de «guerra sucia» y desacreditando la investigación, refleja la tensión existente y la importancia de mantener una comunicación clara y abierta entre ambos países.