En un fallo que marca un precedente en la lucha por los derechos de las personas transgénero en México, el Juzgado Primero de Distrito en el Estado de Baja California Sur, con sede en La Paz, ha ordenado a la Federación Mexicana de Voleibol (FMVB) permitir la inscripción de mujeres transgénero en sus torneos. Esta decisión surge en el contexto del juicio de amparo indirecto 906/2023, interpuesto por una mujer transgénero cuya solicitud de registro fue inicialmente rechazada bajo el argumento de que no cumplía con el requisito de ser “mujer por nacimiento”.
La quejosa, una mujer transgénero mexicana que ya había actualizado su nombre y sexo en su acta de nacimiento y en la Clave Única de Registro de Población (CURP), fue impedida de registrarse en el “Sistema Nacional de Afiliación FMVB-SIRED 2023”. Frente a esta negativa, la atleta promovió un juicio de amparo, argumentando que la restricción violaba su derecho constitucional a la igualdad y no discriminación.
El juez federal, López Fuentes, concluyó que la limitante impuesta por la FMVB era arbitraria y discriminatoria, violando el derecho humano de la quejosa a la práctica deportiva. En su sentencia, destacó que en México, el derecho a la práctica segura del deporte debe ser desarrollado sin ningún tipo de discriminación, y que este derecho debe ser respetado y garantizado sin importar características personales como raza, sexo, religión o condición física.
A pesar de haber obtenido una suspensión provisional que le permitió su registro, la atleta enfrentó nuevas trabas al intentar inscribirse en un torneo de voleibol en La Paz, donde nuevamente su solicitud fue rechazada por la Asociación Sudcaliforniana de Voleibol. Ante esta nueva negativa, la mujer transgénero demandó el amparo y protección de la justicia, logrando que el tribunal reconociera la discriminación en su contra.
Este fallo no solo permite la inscripción de esta mujer transgénero, sino que sienta un precedente importante en la defensa de los derechos de la comunidad trans en el ámbito deportivo. La resolución subraya la importancia de asegurar que todos los individuos, independientemente de su identidad de género, puedan ejercer su derecho a participar en actividades deportivas de manera segura y sin discriminación.