CDMX a 27 de agosto, 2024.- El líder nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, ha confirmado la extinción del partido tras perder su registro legal como partido político nacional. En un emotivo mensaje difundido a través de redes sociales, Zambrano declaró que «se cierra un ciclo histórico de la vida de nuestro partido, que tanto aportó a la transición democrática de nuestro país». Sin embargo, también dejó claro que los miembros del PRD no se quedarán inactivos y ya están trabajando para consolidar un nuevo proyecto partidista con una agenda progresista y abierta a la sociedad.
El PRD, fundado en 1989, jugó un papel crucial en la política mexicana, especialmente en la transición democrática del país en la década de 1990 y principios de los 2000. Sin embargo, el partido ha enfrentado una constante disminución de su apoyo electoral en los últimos años. Las elecciones del 2 de junio evidenciaron, según Zambrano, «un agotamiento de nuestro proyecto político». La pérdida del registro fue confirmada por los órganos electorales, marcando así el fin de una era para el Sol Azteca.
Jesús Zambrano, en su mensaje, reconoció que hacer un “corte de caja” sobre el PRD no es sencillo, pero es necesario como un acto de responsabilidad ante el país, los electores y la militancia del partido. A pesar de este cierre, Zambrano subrayó que el espíritu del PRD y sus ideales siguen vivos en la búsqueda de un nuevo proyecto partidista.
El PRD fue fundado por una alianza de líderes de izquierda, incluidos miembros disidentes del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y activistas del movimiento democrático en México. Bajo la dirección de figuras como Cuauhtémoc Cárdenas, el PRD luchó por una mayor democracia y justicia social en el país, logrando significativos avances en la década de 1990.
Sin embargo, el liderazgo del PRD enfrentó desafíos internos y externos, incluyendo la gestión de Andrés Manuel López Obrador, quien alguna vez fue una figura central en el partido antes de fundar Morena. Según Zambrano, la salida de López Obrador del PRD para formar Morena fue un punto de inflexión que marcó el comienzo del declive del Sol Azteca.
Con la desaparición del PRD, la izquierda política en México se encuentra en una encrucijada. Jesús Zambrano ha prometido que los exmilitantes del PRD continuarán trabajando en un nuevo proyecto político que mantenga una agenda progresista y que sea inclusiva para todos los sectores de la sociedad. Esta transición representa una oportunidad para redefinir y revitalizar los principios y objetivos que alguna vez hicieron del PRD un partido influyente en la política mexicana.
El anuncio de Zambrano ha generado una variedad de reacciones en el panorama político, desde la nostalgia por los logros pasados del PRD hasta la expectativa sobre lo que traerá este nuevo capítulo para sus antiguos miembros y seguidores.