Editor web Maya Comunicación 
La inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024, un evento esperado con gran anticipación, dejó a muchos espectadores sorprendidos y decepcionados debido a la ausencia de varios artistas franceses icónicos. Entre ellos, Daft Punk, el dúo de música electrónica que había generado expectativas sobre un posible regreso, decidió no participar en la ceremonia, lo que provocó una ola de indignación en las redes sociales.
Según el director artístico del evento, Thomas Jolly, las conversaciones con los miembros de Daft Punk llevaron a la conclusión de que no habría reencuentro para la inauguración. A pesar de las expectativas que se habían formado, Jolly explicó que el dúo tomó una decisión firme de no participar. «Respetamos completamente la decisión del grupo y lamentamos cualquier confusión que mis declaraciones anteriores hayan causado», comentó Jolly, pidiendo disculpas por la ambigüedad que había generado entre los fanáticos.
La noticia de la ausencia de Daft Punk no fue la única que dejó un sabor amargo en la boca de los aficionados a la música y la cultura francesa. Otros artistas reconocidos del país tampoco hicieron acto de presencia, dejando un vacío notable en la celebración de uno de los eventos más importantes del año.
En las redes sociales, la reacción no se hizo esperar. Miles de fanáticos expresaron su descontento y decepción, creando hashtags y compartiendo mensajes de frustración. «¿Cómo es posible que en los Juegos Olímpicos en París no estén representados nuestros artistas más emblemáticos?», se preguntaba un usuario en Twitter. «Esperaba ver a Daft Punk volver a los escenarios, ¡esto es una gran decepción!», escribió otro.
La ceremonia, a pesar de contar con actuaciones de otros talentos destacados y una producción impresionante, no pudo evitar la sombra de la controversia. La ausencia de Daft Punk y otros artistas franceses icónicos dejó claro que, aunque los Juegos Olímpicos son una celebración global del deporte y la cultura, las expectativas del público pueden ser difíciles de satisfacer.
En medio de la indignación, algunos fanáticos mantienen la esperanza de que estos artistas puedan sorprender en futuras presentaciones o eventos relacionados con los Juegos. Sin embargo, por ahora, la ceremonia inaugural de París 2024 será recordada tanto por sus momentos brillantes como por las ausencias notables que dejaron a muchos deseando más.
