CDMX a 18 de marzo de 2024.-En un esfuerzo por asegurar un futuro económico próspero para las generaciones jóvenes, la diputada Vania Roxana Ávila García (MC) ha presentado una iniciativa destinada a reformar la Ley General de Educación, con el objetivo de fomentar una cultura financiera sólida y accesible.
La propuesta, actualmente en análisis por la Comisión de Educación, busca integrar la enseñanza de conceptos financieros dentro del sistema educativo nacional. Esto incluiría la adición de la fracción XI al artículo 15, estableciendo que la educación impartida por el Estado y sus organismos afiliados debe tener como fin prioritario el desarrollo de habilidades financieras.
Además, la iniciativa propone que las autoridades educativas impulsen prácticas educativas enfocadas en la difusión de la cultura financiera y la importancia del ahorro en todas las regiones del país. Se destaca la importancia de inculcar el hábito del ahorro desde una edad temprana, subrayando que constituye una inversión a largo plazo y un respaldo para el futuro.
Es fundamental abordar esta cuestión con una perspectiva de género, asegura la diputada, para garantizar que todas las personas jóvenes tengan acceso a la educación financiera independientemente de su género o situación socioeconómica. Se reconoce que, lamentablemente, existe la percepción errónea de que el ahorro es un tema aburrido y reservado solo para quienes estudian economía, lo que pone en riesgo la calidad de vida futura de los jóvenes.
La comprensión de conceptos financieros básicos, como ingresos, egresos, tasa de interés y ahorro, se considera fundamental para tomar decisiones financieras racionales y responsables. Por lo tanto, se aboga por la implementación de políticas públicas que fomenten la conciencia sobre una correcta administración financiera desde la juventud, lo que eventualmente se traducirá en una mejor calidad de vida tanto en la vida laboral como en la etapa del retiro.
En resumen, la inclusión de la educación financiera como una política de Estado es vista como un paso fundamental y urgente para el desarrollo del país, ya que capacita a las personas para aprovechar de manera óptima sus recursos financieros, lo que conduce a un crecimiento económico sostenible y equitativo.