La desaparición del Comité de Pequeños Operadores por parte del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) ha generado preocupación entre los expertos del sector. Esta decisión responde a la creación de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT), la cual asumirá las facultades de regulación y apoyo a operadores independientes de telecomunicaciones.
Además de grandes operadores, ¿quién conecta a las zonas olvidadas?
Desde su creación en 2023, el Comité de Pequeños Operadores sirvió como un puente de diálogo entre los concesionarios de menor escala y el regulador, permitiendo la implementación de estrategias para la expansión de redes de conectividad en zonas donde las grandes empresas como Telcel, AT&T o Megacable no tienen presencia. Sin embargo, con su extinción, organizaciones y especialistas temen que estas iniciativas queden en el olvido.
Preocupación entre expertos y operadores
Rocío Villanueva Cordero, presidenta de la Asociación Mexicana de Operadores Móviles Virtuales (AMOMVAC), señaló que la incertidumbre sobre las acciones de la nueva Agencia pone en riesgo a los pequeños operadores. «El Comité permitía exponer nuestras necesidades y buscar soluciones rápidas, pero ahora no hay claridad sobre qué pasara con estos esfuerzos», comentó.
Por su parte, Salomón Padilla, vicepresidente de la Asociación de Telecomunicaciones Independientes (ATIM), advirtió sobre el impacto negativo de la competencia desigual que enfrentan los pequeños operadores. «El crecimiento de proyectos estatales como CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE TEIT) y Altán Redes ha mermado nuestro mercado, pues ofrecen servicios con tarifas que no podemos igualar», mencionó.
¿Qué sigue para los pequeños operadores?
A pesar de los desafíos, los operadores independientes continúan desempeñando un papel fundamental en la conectividad del país. Estas empresas, organizadas bajo asociaciones como Redes por la Diversidad, WISPMX, ATIM y Telecomunicaciones Indígenas Comunitarias (TIC A.C.), han invertido en infraestructura propia, como antenas, torres y redes de fibra óptica, para ofrecer servicio en comunidades desatendidas.
La industria de las telecomunicaciones en México enfrenta retos significativos, especialmente en la regulación del espectro radioeléctrico. Algunas de estas pequeñas empresas operan en bandas de uso libre, lo que ha generado controversia y, en algunos casos, acusaciones de «operaciones piratas».
El futuro de la conectividad en juego
La desaparición del Comité de Pequeños Operadores podría traducirse en la reducción del apoyo institucional hacia los operadores independientes. Expertos coinciden en que la ATDT debe incluir a estos actores en su estrategia de desarrollo digital y garantizar condiciones equitativas para la competencia.