Este miércoles, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) reveló que Honduras lidera las solicitudes de reconocimiento como refugiados en México desde el inicio de la administración actual hasta junio de 2024, con un total de 172,596 peticiones registradas. Esta cifra representa la más alta entre las nacionalidades que buscan protección en territorio mexicano.
De acuerdo con Andrés Ramírez Silva, titular de la Comar, Honduras es seguido por Haití, con 128,328 solicitudes; Cuba con 68,188; Venezuela con 39,230 y El Salvador con 36,436. Estos datos reflejan la continuidad de flujos migratorios significativos hacia México, con ciudadanos de estos países buscando refugio debido a diversas condiciones sociales, económicas y políticas en sus lugares de origen.
Durante la administración actual, que comenzó en diciembre de 2018 y concluirá el próximo 30 de septiembre, la Comar ha gestionado un total de 41,427 solicitudes de enero a junio de 2024. Esta cifra marca una reducción del 45.5% respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se reportaron 76,130 peticiones. En el primer semestre de 2022, por su parte, se registraron 58,660 casos.
En cuanto a los datos anuales, la Comar reportó 140,831 peticiones en 2023; 119,083 en 2022 y 129,329 en 2021. Los años previos mostraron cifras menores, con 40,733 en 2020; 70,120 en 2019 y 29,410 en 2018.
Estas estadísticas reflejan un panorama dinámico de migración hacia México, que ha enfrentado desafíos constantes derivados de flujos migratorios desde Centroamérica y el Caribe. Aunque la migración ha mostrado variaciones, se mantiene significativa a pesar de las restricciones y desafíos impuestos por la pandemia de COVID-19 y las políticas migratorias de los países de la región.
En paralelo, datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos indican que aproximadamente 324,000 ciudadanos de Honduras, Guatemala y El Salvador llegaron a la frontera sur estadounidense en 2023, marcando una disminución del 29% con respecto a 2021.
La situación migratoria en México ha estado marcada desde octubre de 2018, cuando caravanas de migrantes centroamericanos comenzaron a atravesar el país con destino a Estados Unidos. Esta realidad ha persistido a lo largo de los años, configurando un fenómeno migratorio complejo que continúa desafiando a las autoridades y requiere respuestas humanitarias y políticas coordinadas a nivel regional.
La Comar y otras instituciones pertinentes continúan trabajando para gestionar adecuadamente las solicitudes de refugio, brindando atención y protección a aquellos que buscan resguardo en México debido a diversas situaciones de vulnerabilidad en sus países de origen.