El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, Manuel Añorve Baños, ha hecho un llamado al bloque oficialista integrado por Morena, PT, PES y Partido Verde, para que no caigan en el falso discurso de golpismo o intromisión entre poderes, después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inconstitucional el Plan B del gobierno federal.
Añorve Baños ha pedido reflexión y respeto por las instituciones democráticas del país, al reconocer que en el Congreso de la Unión se han estado haciendo las cosas mal. La Corte ha cumplido con su deber al señalar que el Plan B del gobierno no cumplía con los requisitos legales necesarios para su aprobación.
“El bloque de contención y, ahora La Suprema Corte, ha sido clara en señalar que el fin no justifica los medios, y que incluso en situaciones urgentes es necesario respetar los procedimientos establecidos por la ley”, ha afirmado el legislador priista.
El senador ha asegurado que algunas personas han criticado la decisión de la Suprema Corte, argumentando que se trata de una intromisión en la labor del gobierno y del legislativo. Sin embargo, es importante recordar que vivimos en un estado de derecho, en el que las instituciones tienen roles y funciones específicas. La Suprema Corte tiene la responsabilidad de garantizar que las leyes y la Constitución se cumplan, y en este caso, ha señalado que el Plan B no respetó los procedimientos establecidos por la ley.
Añorve Baños ha pedido al bloque oficialista que en lugar de criticar su decisión, debemos valorarla y reconocerla como una medida necesaria para fortalecer nuestro estado de derecho. En lugar de culpar a la Corte, ha afirmado, deberíamos cumplir con nuestros propios reglamentos y respetar el proceso legislativo constitucional.
“Los únicos culpables de que la Suprema Corte tenga que enmendarnos la plana un día sí y otro también, son la mayoría aquí representada”, ha concluido el senador. La decisión histórica de la Corte solo viene a fortalecer nuestro marco jurídico institucional y a garantizar que en el parlamento, las minorías siempre tendrán el derecho a ser escuchadas y a no ser atropelladas por las mayorías irreflexivas.