En un paso decisivo para avanzar en la construcción del Tren Maya, el gobierno federal ha decretado la expropiación de más de 57 hectáreas en diversos municipios de Quintana Roo, Campeche y Tabasco. Esta medida, publicada a través de cuatro decretos en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación (DOF), responde a la necesidad de ampliar la infraestructura ferroviaria de este ambicioso proyecto.
Los decretos especifican que las tierras expropiadas, correspondientes a ejidos y áreas de uso común, serán utilizadas para desarrollar el trazado del Tren Maya, una iniciativa clave para el desarrollo turístico y económico del sureste mexicano.
Detalles de la Expropiación:
- Quintana Roo:
- En el municipio de Lázaro Cárdenas, se expropiarán 13 hectáreas con una indemnización de 6 millones 956 mil pesos. Una vez que Fonatur Tren Maya acredite el pago o depósito de la indemnización, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano llevará a cabo la ejecución.
- En el ejido “Ramonal Río Hondo” del municipio de Othón P. Blanco, se expropiarán 73 áreas de uso común por un monto de 86 mil 850 pesos.
- Campeche:
- En el ejido “Don Samuel” en el municipio de Escárcega, se expropiarán 47 hectáreas de uso parcelado, con una indemnización de 9 millones 870 mil pesos.
- Tabasco:
- En el ejido “El Último Esfuerzo” del municipio de Balancán, se expropiará una hectárea de uso parcelado con una indemnización de 834 mil 036 pesos.
La expropiación se realiza en virtud de la “utilidad pública”, y las compensaciones económicas están destinadas a los propietarios de las tierras afectadas. El Tren Maya, con una inversión proyectada de miles de millones de pesos, busca conectar y fomentar el desarrollo en los estados del sureste mexicano, promoviendo el turismo y el crecimiento regional.
Este avance en el proyecto subraya el compromiso del gobierno federal con la infraestructura y el desarrollo económico del país, mientras se llevan a cabo las compensaciones y se gestionan los procesos legales correspondientes para garantizar la correcta ejecución de las obras.