CDMX a 16 de abril, 2024.- El Gobierno de la Ciudad de México ha tomado medidas decisivas para abordar la preocupación creciente sobre la calidad del agua en la Alcaldía Benito Juárez, tras identificar y cerrar el pozo Alfonso XIII, que fue señalado como la fuente del problema. Martí Batres Guadarrama, Jefe de Gobierno, aseguró que este pozo está actualmente fuera de servicio y que las medidas de limpieza han sido efectivas, eliminando cualquier presencia de olor o sustancias extrañas en el agua distribuida a la comunidad.
Durante la sesión de Preguntas y Respuestas que siguió a la presentación del decreto para el «Parque Ecológico Loreto y Peña Pobre», Batres detalló que el problema de agua no se ha extendido más allá de las áreas inicialmente afectadas y destacó que en la mayoría de los domicilios revisados, el agua ya no presenta olores anormales. El Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) ha instalado 11 puntos de monitoreo, y en todos ellos se ha confirmado la ausencia de olores, lo que indica que las medidas tomadas han sido exitosas.
La atención del gobierno no solo se ha limitado a la solución técnica del problema, sino que ha incluido un esfuerzo integral para apoyar a los residentes afectados. Más de mil funcionarios públicos de 18 dependencias diferentes han sido desplegados en la zona para realizar visitas domiciliarias, distribuir garrafones de agua, y limpiar cisternas y tinacos, con el apoyo de cuatro plantas potabilizadoras de agua proporcionadas por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y la Secretaría de Marina (SEMAR).
Además, el Gobierno de la Ciudad ha proporcionado atención médica a domicilio y en puestos de mando, totalizando más de 800 intervenciones de salud, y ha llevado a cabo casi 5,500 visitas domiciliarias, enfocadas en la participación ciudadana y el apoyo comunitario.
El esfuerzo conjunto ha incluido la participación activa de la comunidad, aunque el Jefe de Gobierno ha criticado la tardía respuesta de la Alcaldía Benito Juárez, señalando una falta de presencia y apoyo iniciales. No obstante, ha asegurado que el Gobierno capitalino continuará trabajando intensamente para resolver completamente la situación y garantizar la seguridad y bienestar de los ciudadanos.
Los estudios realizados por Petróleos Mexicanos (PEMEX) y SACMEX han confirmado que no existe riesgo de explosividad en la zona, y el proceso de vaciado, limpieza y rellenado de cisternas está en su fase final, asegurando que el agua distribuida sea segura y de calidad.