CDMX a 22 de octubre de 2024.-En un esfuerzo coordinado por proteger las áreas naturales de la Ciudad de México, el Gobierno Capitalino, junto con la Fiscalía General de Justicia y la Alcaldía de Tlalpan, han respondido a las denuncias ciudadanas al recuperar una significativa extensión de suelo de conservación en el kilómetro 7.2 de la Carretera Picacho-Ajusco. Este operativo, que incluyó la demolición de construcciones ilegales en la zona, subraya el compromiso de las autoridades de no tolerar más invasiones en los espacios ecológicos de la capital.
La secretaria del Medio Ambiente (SEDEMA), Julia Álvarez Icaza Ramírez, enfatizó que bajo la dirección de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, la administración actual tiene una firme determinación de proteger los bosques y las áreas verdes de la ciudad. “No se permitirá ninguna invasión más en suelo de conservación. Queremos seguir protegiendo nuestros bosques, tierras agrícolas y cuerpos de agua, que son los pulmones verdes de la ciudad”, declaró con firmeza.
Álvarez Icaza también destacó que más de la mitad del territorio capitalino es considerado suelo de conservación, según lo estipulado en la Constitución de la Ciudad de México. En este contexto, Tlalpan se presenta como una de las alcaldías más relevantes en materia ambiental, y su defensa es fundamental para la salud ecológica de toda la metrópoli.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, a través de su agente Gabriela Galicia, inició una investigación tras recibir múltiples denuncias sobre la lotificación y la construcción ilegal en la zona. Galicia explicó que, tras la investigación, se logró asegurar el predio y proceder a su demolición, resaltando la colaboración efectiva entre las diferentes instancias de gobierno para abordar esta problemática.
Por su parte, la alcaldesa de Tlalpan, Gabriela Osorio Hernández, subrayó la importancia de la cooperación entre los distintos niveles de gobierno para garantizar una respuesta rápida a las invasiones. Hizo un llamado a la ciudadanía a continuar denunciando estos hechos, reafirmando que “la protección de nuestros bosques es una convicción muy clara por parte del Gobierno de la Ciudad de México”.
Este esfuerzo conjunto es un paso significativo hacia la recuperación y conservación de las áreas naturales, reafirmando el compromiso de las autoridades para preservar el patrimonio ecológico de la capital y garantizar un futuro sostenible para sus habitantes.