El mundo de las redes sociales está que arde con el último capítulo del enfrentamiento entre dos de sus figuras más polémicas: Mr. Doctor y Maryfer Centeno. Lo que comenzó como una guerra de videos y declaraciones ha escalado a niveles insospechados, llegando hasta los juzgados y provocando una orden de aprehensión que tiene a todos con el ojo cuadrado.
Todo empezó en noviembre pasado, cuando Maryfer Centeno, la grafóloga más famosa de México, decidió ponerle un alto a Mr. Doctor. ¿La razón? Según ella, el youtuber la estaba atacando con videos donde la tachaba de estafadora y hasta la amenazaba.
Centeno no se quedó de brazos cruzados y presentó una denuncia por discriminación, amenazas y apología del delito. Vaya coctel explosivo que armó la experta en lenguaje corporal.
Por su parte, Jorge Octavio Arroyo, el verdadero nombre detrás de Mr. Doctor, no se ha quedado callado. El médico e influencer asegura que solo está diciendo la verdad y que lo quieren censurar. Incluso se presentó en el juzgado para dar la cara, aunque la audiencia se había pospuesto. ¡Qué valiente!
Pero la cosa se puso color de hormiga cuando Mr. Doctor soltó la bomba en Twitter: «Acaban de girar un arresto hacia mi persona, si algo me pasa hago responsable a MC». ¡Pum! El conflicto pasó de las redes a la vida real en un abrir y cerrar de ojos.
La situación está que arde. Por un lado, tenemos a Maryfer Centeno, quien asegura que Mr. Doctor la amenazó y discriminó. Por el otro, está el youtuber, quien dice que solo está ejerciendo su libertad de expresión y que lo quieren callar por decir la verdad.
Lo cierto es que este pleito ya llegó hasta la mismísima conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum. ¿Será que ahora sí se pone seria la cosa?
Mientras tanto, en el tribunal de la opinión pública, la gente está dividida. Algunos apoyan a Mr. Doctor con el hashtag #LibertadDeExpresionMrDoctor, mientras otros están del lado de Maryfer Centeno.
Lo único seguro es que este drama está lejos de terminar. ¿Quién ganará esta batalla? ¿La grafología o la medicina? ¿Las redes sociales o los juzgados? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: todos estaremos pegados a nuestras pantallas para no perdernos ni un solo capítulo de este culebrón digital.