Por Bruno Cortés
El diputado Germán Martínez Cázares, integrante de la Sección Instructora del Congreso, no se anda con rodeos cuando se trata de aclarar los casos de dos figuras políticas de gran peso: el diputado Cuauhtémoc Blanco Bravo (Morena) y el senador Alejandro Moreno Cárdenas (PRI). En un momento de tensión en la política mexicana, Martínez, de forma directa y firme, aseguró que es inaceptable que se sigan retrasando las decisiones sobre sus casos y que se debe actuar sin dilación.
El legislador del PAN, quien estuvo en la última reunión de la Sección Instructora, expresó su molestia por el tiempo que se está tomando para resolver los casos de ambos políticos. En particular, cuestionó el hecho de que aún no se haya admitido a estudio el caso de Blanco Bravo. «Conmigo no cuentan para ninguna dilación», señaló, subrayando que no busca ni proteger ni encubrir a nadie. De hecho, hizo un llamado a la Fiscalía General del Estado de Morelos para que se cumpliera con los requerimientos pendientes, como ya lo había respondido la misma Fiscalía el pasado 21 de febrero.
Martínez dejó claro que no se presta a impunidades. A pesar de que su propuesta de admitir el caso de Blanco fue rechazada por la mayoría de la Sección Instructora (con un resultado de 3-1), el diputado insistió en que el tema no se debe cerrar de ninguna manera. «Yo no culpo a nadie, ni busco impunidades», remarcó, destacando que su único interés es que se revisen los expedientes de manera exhaustiva, sin dejar lugar a que se arrastre la burocracia y el tiempo.
El caso de Cuauhtémoc Blanco, gobernador de Morelos, fue uno de los principales puntos que abordó, mencionando que, en su opinión, ya había suficientes elementos para que el asunto fuera considerado. Martínez también señaló que, si bien presume la inocencia de Blanco como parte de la presunción de inocencia que todo acusado merece, es crucial que el Congreso revise estos casos desde una «perspectiva de género», especialmente con el contexto del 8M (Día Internacional de la Mujer). De acuerdo con el diputado, no se puede hablar de perspectiva de género y al mismo tiempo ignorar las agresiones hacia las mujeres o no darles la debida atención.
En cuanto al caso de Alejandro Moreno, el presidente nacional del PRI, Martínez hizo énfasis en que aún falta conocer los detalles de un amparo que podría complicar la procedencia de su declaración. El legislador del PAN pidió tener acceso a la sentencia completa para poder valorar todos los efectos del amparo antes de tomar una decisión final.
Martínez fue claro en que, en estos casos, la única tarea del Congreso es revisar tres puntos fundamentales: si el legislador tiene fuero, si existe un delito y si hay elementos que justifiquen una declaración de procedencia. La culpabilidad, insistió, corresponde a un juez, no a la Sección Instructora ni a la Cámara de Diputados. En este sentido, dejó en claro que su función no es buscar culpables ni venganzas personales.
Por último, el diputado lamentó la división dentro de Morena sobre cómo proceder con estos casos. Exigió que se aclarara si realmente están comprometidos con revisar los expedientes, recordando que, como feminista, su primera regla es creerle a las mujeres que denuncian agresiones. Para Martínez, las dudas sobre este tema no solo son dañinas, sino que dan una mala imagen de cara al Día Internacional de la Mujer.