Por Juan Pablo Ojeda
La mañana del 8 de octubre, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, presentó en la conferencia matutina la Estrategia Nacional de Seguridad que implementará el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo. Esta estrategia se centra en la consolidación y fortalecimiento de la Guardia Nacional (GN), una corporación que ha sido objeto de debate y controversia desde su creación.
Uno de los aspectos más relevantes de la estrategia es la reciente integración de la GN a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), efectuada el 1 de octubre. Este cambio se deriva de una reforma impulsada por el oficialismo desde 2022, la cual fue inicialmente declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en abril de 2023, argumentando que la GN debe ser un cuerpo de seguridad civil y no militar. Sin embargo, con el apoyo de la mayoría calificada de Morena y sus aliados, una nueva versión de esta reforma fue aprobada y publicada en el Diario Oficial de la Federación.
García Harfuch, en su intervención, defendió la incorporación de la GN a la Sedena, asegurando que no representa un signo de militarización, sino una oportunidad para profesionalizar y consolidar la institución aprovechando las fortalezas del cuerpo castrense. «Lo que estamos haciendo es aprovechar las capacidades de la Secretaría de la Defensa Nacional para que la Guardia Nacional se pueda consolidar», afirmó, destacando la importancia del sistema educativo de la Sedena en este proceso.
El secretario subrayó que la GN se define como “una institución policial de la Federación, con un esquema de formación, profesionalización y capacitación definido por una doctrina militar, bajo regulación estricta que garantice el respeto a los derechos humanos”. Además, señaló que uno de los principales objetivos de la GN será brindar apoyo en comunidades que carecen de una Policía Municipal confiable o de una Policía Estatal bien estructurada.
Con más de 133 mil elementos actualmente en la GN, la Estrategia Nacional de Seguridad busca maximizar su despliegue y evitar lo que García Harfuch calificó como un «retroceso». “Un retroceso sobre la Guardia Nacional implicaría esfuerzos perdidos y nos tomaría años construir otro cuerpo de seguridad”, advirtió, enfatizando los logros alcanzados hasta ahora, como la creación de cuarteles y el incremento de su presencia en el territorio nacional.