Por Juan Pablo Ojeda
En un acto lleno de simbolismo y oficialidad, las Fuerzas Armadas de México celebraron el último desfile militar bajo el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, con motivo del 214 aniversario del inicio de la Independencia de México. La ocasión no solo sirvió para conmemorar la histórica fecha, sino también para marcar el traspaso de poder que se concretará el 1 de octubre, cuando Claudia Sheinbaum asuma la presidencia.
El evento, celebrado en el emblemático Zócalo de la Ciudad de México, fue testigo de un desfile en el que el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea destacaron su papel en la administración de López Obrador. Junto con los secretarios de Marina, José Rafael Ojeda, y de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, el presidente recorrió a pie el Zócalo para izar la bandera monumental y luego, desde un vehículo descubierto, realizó el pase de revista a los 15,000 agentes de las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional, antes de presenciar el desfile como Comandante Supremo.
Durante el gobierno de López Obrador, las Fuerzas Armadas han jugado un rol protagónico no solo en tareas de seguridad pública, sino también en la construcción de importantes obras de infraestructura como el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la refinería Olmeca en Dos Bocas, y el Tren Maya. Esta militarización de labores civiles ha sido una de las características distintivas de su mandato.
El despliegue de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad pública, aprobado por el Congreso en 2022, se extenderá hasta 2028, mientras que la Guardia Nacional, creada inicialmente como una institución civil, quedará bajo el mando del Ejército.
Durante el desfile, los titulares de la Secretaría de Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional rindieron tributo a López Obrador por su liderazgo. José Rafael Ojeda agradeció al presidente por su guía y apoyo, y se dirigió a Claudia Sheinbaum, expresando el compromiso de las Fuerzas Armadas con la nueva administración. “El pueblo ha expresado su voluntad, y estamos listos para recibir a la primera mujer presidenta en nuestra historia”, comentó Ojeda, quien será reemplazado por Raymundo Pedro Morales.
Por su parte, Luis Cresencio Sandoval, quien también dejará su cargo en breve, agradeció a López Obrador por fortalecer a las Fuerzas Armadas y a la Guardia Nacional, y aseguró que el Ejército está preparado para seguir cumpliendo con las órdenes de la próxima Comandante Suprema.
El acto se enmarca en un contexto de creciente controversia sobre la militarización en México, especialmente en relación con las acusaciones de abusos y el uso desproporcionado de la fuerza. Aunque López Obrador prometió eventualmente devolver a los soldados a sus cuarteles, justificó la intervención militar en seguridad como una medida necesaria frente al crimen.
Acompañado de su esposa Beatriz Gutiérrez, y de varios funcionarios clave como Luisa María Alcalde, Rosa Icela Rodríguez, Rogelio Ramírez de la O, Alejandra Frausto, y el alcalde Martí Batres, López Obrador concluyó su mandato con un desfile que no solo celebró la Independencia de México, sino que también marcó el final de una era en la que las Fuerzas Armadas jugaron un papel central en la vida nacional.