La ciudadanía demanda un gobierno con contrapesos. Según un estudio del Instituto Belisario Domínguez (IBD), en el Congreso, solo seis de cada diez iniciativas enviadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador fueron aprobadas, marcando la tasa más baja desde 1917.
El análisis revela que, a pesar de contar con mayoría simple en ambas cámaras, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, la tasa de aprobación de las iniciativas presidenciales fue inferior a la de sus tres predecesores más recientes, y similar o menor a la registrada desde hace más de un siglo.
La tasa de aprobación de las iniciativas del presidente López Obrador se situó en un 63.36%, en contraste con el 79.84% durante el mandato de Enrique Peña Nieto, el 79.55% de Felipe Calderón y el 74.70% de Vicente Fox. Datos recopilados por César Alejandro Giles Navarro indican que no se había registrado una tasa de aprobación tan baja desde 1917, ya que durante 83 años (1917-2000), la tasa superó el 98 por ciento.
El estudio, titulado “La tasa de aprobación de las iniciativas del Ejecutivo Federal 2018-2024: entre el gobierno dividido y la falta de oficio político”, muestra que entre el 1 de diciembre de 2018 y el 8 de mayo de 2024, el presidente López Obrador envió 101 iniciativas, de las cuales solo 64 fueron aprobadas y publicadas en el Diario Oficial de la Federación.
Es importante recordar que el último paquete de iniciativas enviado por el presidente al Congreso fue el pasado 5 de febrero de 2024, algunas de las cuales ya han sido aprobadas por los diputados y senadores federales.
El estudio sugiere que esta baja tasa de aprobación se debe a diversas causas, principalmente la falta de una mayoría calificada para avanzar en reformas constitucionales. También señala la ineficiencia del presidente López Obrador debido a su tendencia a confrontar a la oposición, su escasa disposición para negociar y el uso de iniciativas como herramienta electoral en la etapa final de su mandato.