FMI ajusta perspectivas económicas para México y América Latina
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado sus proyecciones de crecimiento económico para México y América Latina en su última actualización de las Perspectivas de la Economía Mundial, presentada en una videoconferencia por la subdirectora del Departamento de Investigación, Petya Koeva Brooks.
En cuanto a México, el FMI ha reducido sus expectativas de crecimiento para 2024 del 2.4% estimado anteriormente a un 2.2%. Este ajuste a la baja se atribuye principalmente a una moderación en la demanda interna, influenciada también por una menor demanda de Estados Unidos debido a su propia desaceleración económica.
Sin embargo, para 2025, el FMI ha aumentado ligeramente sus proyecciones de crecimiento para México, pasando del 1.4% anteriormente estimado al 1.6%. La subdirectora del FMI destacó que, aunque la inflación en México se ha estabilizado desde mediados de 2023, persisten desafíos con una inflación de servicios más rígida y aumentos salariales que podrían mantener la presión sobre los precios.
Respecto a América Latina y el Caribe, el FMI ajustó a la baja su proyección de crecimiento para 2024 de 2% a 1.9%, debido en parte al impacto de las inundaciones en Brasil y a la moderación de la demanda en México. Para 2025, sin embargo, las perspectivas se revisaron al alza de 2.5% a 2.7%, impulsadas por la reconstrucción en Brasil tras las inundaciones y factores estructurales favorables.
A nivel mundial, las proyecciones del FMI para 2024 se mantuvieron en un crecimiento del 3.2%, con una ligera revisión al alza para 2025, pasando del 3.2% al 3.3%. Se destacó un fortalecimiento en la actividad y el comercio global a finales de 2023, impulsado por exportaciones robustas en Asia, especialmente en tecnología.
En términos de inflación global, el FMI subrayó que la inflación de servicios sigue siendo un desafío significativo, complicando la normalización de la política monetaria en muchos países. Se prevé que las tasas de interés se mantengan altas por más tiempo debido a estas presiones inflacionarias, exacerbadas por tensiones comerciales renovadas y incertidumbres geopolíticas.
En cuanto a los riesgos, el FMI señaló que, aunque equilibrados en general, los riesgos a corto plazo para la inflación han aumentado, especialmente relacionados con la persistencia de la inflación en el sector de servicios y las tensiones comerciales internacionales. Estos factores podrían poner en peligro la estabilidad de precios si no se gestionan adecuadamente.
En conclusión, el FMI instó a una combinación de políticas coherentes que apoyen la estabilidad económica y gestionen los riesgos emergentes en un contexto global incierto y dinámico.