Fernández de Cevallos desafía a AMLO a un cara a cara en las Mañaneras
Editor web Maya Comunicación 
CDMX a 14 de marzo, 2024.- La política mexicana se enciende con un enfrentamiento verbal entre dos de sus figuras más emblemáticas. Diego Fernández de Cevallos, conocido popularmente como «Jefe Diego», ha lanzado un desafío directo al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tras ser acusado de enriquecimiento a través de prácticas cuestionables. El campo de batalla: las conferencias matutinas del presidente, también conocidas como «las mañaneras».
La disputa se originó cuando AMLO, en su habitual conferencia, señaló a Fernández de Cevallos por hacer negocios en Punta Diamante, Acapulco, mediante el uso de influyentismo, una práctica comúnmente denominada «coyotaje», lo que, según el presidente, catapultó al Jefe Diego a convertirse en uno de los abogados más ricos del mundo.
La respuesta de Fernández de Cevallos no se hizo esperar. A través de su cuenta en X (anteriormente Twitter), el abogado y político desestimó las acusaciones del presidente, calificándolas de embustes reciclados. Con un tono desafiante, Fernández de Cevallos tachó a AMLO de rufián y lo instó a invitarlo a una de sus conferencias mañaneras para confrontarlo cara a cara, en un gesto que subraya la intensidad de la rivalidad política entre ambos.
Este episodio es el más reciente en una larga serie de enfrentamientos verbales que han caracterizado la relación entre el presidente y Fernández de Cevallos, una figura central en la política mexicana con una carrera que abarca varias décadas. La contienda verbal entre AMLO y el Jefe Diego trasciende el mero intercambio de insultos, reflejando profundas divisiones ideológicas y personales dentro del espectro político mexicano.
La invitación al diálogo, aunque lanzada en términos confrontativos, abre la posibilidad de un debate público directo y sin precedentes que podría ofrecer a los ciudadanos una ventana única a las posturas y argumentos de dos de sus líderes más influyentes. Sin embargo, resta ver si el presidente aceptará el guante lanzado por Fernández de Cevallos, marcando un posible precedente en la comunicación política en México.
