CDMX a 3 de septiembre, 2024.- El exministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cossío, ha lanzado una severa advertencia sobre las posibles consecuencias de la reforma al Poder Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Según Cossío, esta reforma podría llevar a que los jueces terminen siendo controlados por grupos criminales, incluidos los narcotraficantes, debido a la falta de control del Estado sobre los altos mandos del Poder Judicial.
Durante su intervención en el Instituto para el Fortalecimiento del Estado de Derecho, Cossío explicó que la reforma plantea un escenario en el que los interesados en ser jueces o magistrados deberán pasar por un proceso electoral, pero sin contar con financiamiento público. Esta situación, asegura, podría derivar en que los jueces busquen apoyo financiero de fuentes privadas, incluyendo grupos delictivos, poniendo en peligro la independencia del Poder Judicial.
«Los jueces no van a acabar siendo de los políticos, van a acabar siendo de los narcos, de los delincuentes, de los capitales, de todos los agentes que juegan en contra del Estado», advirtió Cossío. Añadió que esto representa un riesgo no solo para la justicia en México, sino también para la seguridad de los propios jueces, quienes podrían verse forzados a actuar en favor de quienes financien sus campañas, y no en beneficio de la ciudadanía.
Cossío también resaltó que esta situación podría desencadenar un «ciclo de violencia contra los jueces», similar al que se ha vivido en otros países de América Latina, como Perú, donde desde 2013 se han emitido sentencias con medidas extremas, como la implementación de jueces sin rostro, debido a amenazas del crimen organizado.
El exministro alertó que esta reforma podría despojar al Estado de sus funciones esenciales y afectar la capacidad del Poder Judicial para aplicar la ley de manera imparcial. «Los jueces estarán en una condición de enorme peligro», subrayó Cossío, argumentando que, al depender de financiamiento privado, los jueces podrían quedar expuestos a presiones e influencias externas, poniendo en riesgo la justicia en México.
La reforma propuesta ha generado un debate intenso en el país, con defensores que argumentan la necesidad de un cambio en el sistema judicial, mientras que críticos, como Cossío, advierten sobre los peligros que podrían derivar de su implementación. El futuro de la justicia en México podría estar en juego, y la polémica está lejos de acabar.