La exposición itinerante «México antiguo: maya, azteca y Teotihuacan» concluyó su gira por Japón con un rotundo éxito, alcanzando la impresionante cifra de 556,715 visitantes en sus tres sedes: el Museo Nacional de Tokio, el Museo Nacional de Kyushu y el Museo Nacional de Arte de Osaka. Organizada por la Secretaría de Cultura federal a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en colaboración con la productora Nippon Hoso Kyokai y los museos nacionales de Japón, la muestra demostró la profunda fascinación que despiertan las civilizaciones prehispánicas mexicanas.
La gira comenzó en el prestigioso Museo Nacional de Tokio, donde se exhibió del 15 de junio al 3 de septiembre de 2023, atrayendo a 330,000 visitantes, marcando un récord de asistencia para el museo. Posteriormente, del 3 de octubre al 10 de diciembre de 2023, la muestra se trasladó al Museo Nacional de Kyushu, recibiendo a 88,895 personas. La tercera y última sede fue el Museo Nacional de Arte de Osaka, donde del 6 de febrero al 6 de mayo de 2024, fue admirada por 137,087 visitantes.
La exposición, compuesta por 143 piezas, estuvo dividida en cuatro ejes temáticos: “Una invitación al México antiguo”, “Teotihuacan. Ciudad de dioses”, “El ascenso y caída de las Ciudades-Estado mayas” y “Gran templo azteca de Tenochtitlan”. Entre las piezas más destacadas se encontraba el ajuar de la Reina Roja de Palenque, objetos de oro recuperados del Proyecto Templo Mayor (PTM), esculturas de piedra verde del Proyecto Tlalocan de Teotihuacan, un Chac Mool del Museo Regional de Antropología de Yucatán, el guerrero águila y la olla Tláloc del Museo del Templo Mayor, el Disco de la Muerte del Museo Nacional de Antropología, y monumentales esculturas halladas en la Pirámide de la Serpiente Emplumada en Teotihuacan.
La curaduría de la exposición estuvo a cargo de los renombrados profesores investigadores Takeshi Inomata y Saburo Sugiyama, de la Universidad Estatal de Arizona, en colaboración con Leonardo López Luján, director del Proyecto Templo Mayor del INAH. Esta colaboración aseguró una presentación rigurosa y enriquecedora de las antiguas culturas de México, las cuales prosperaron durante más de tres milenios, desde 1500 a.C. hasta la llegada de los colonizadores españoles en el siglo XVI.
La exhibición no solo exploró la riqueza artística y cosmológica de las civilizaciones maya, mexica y de Teotihuacan, sino que también destacó sus profundas conexiones con la naturaleza y sus expresiones universales de fe y devoción.
Los visitantes japoneses pudieron admirar obras provenientes de las zonas arqueológicas de Palenque, Toniná, Teotihuacan, Templo Mayor y sus respectivos museos de sitio, así como del Museo Nacional de Antropología, el Museo Regional de Antropología de Yucatán, Palacio Cantón, la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia y el Gran Museo del Mundo Maya de Mérida.
Este intercambio cultural entre México y Japón no solo permitió a los japoneses conocer la magnificencia de las antiguas civilizaciones mexicanas, sino que también fortaleció los lazos de amistad entre ambos países, subrayando el valor de la cooperación internacional en la preservación y difusión del patrimonio cultural.