Acción Nacional se une al clamor de la sociedad porque termine la violencia y se recupere la paz en todo el territorio nacional. Creemos que ya es tiempo y que más vale tarde que nunca, que el gobierno voltee a ver y escuche a las y los mexicanos que demandan seguridad para sus familias.
Así lo expresó el dirigente Nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, tras señalar que la militarización de la seguridad que realizó López Obrador desde el inicio de su mandato, no sirvió para nada porque se generó la peor ola de violencia de la que se tenga registro con más de 126 mil asesinatos, 380 mil mexicanos desplazados, 30 mil personas desaparecidas y 10 feminicidios diarios durante este gobierno, prueba suficiente para que el régimen cambie su fallida estrategia de seguridad.
“¿Qué más necesita López Obrador para corregir su estrategia de seguridad? ¿cuántos muertos más debe haber para que escuche el clamor de la sociedad? Ya es tiempo de detener el río de sangre que recorre el país. Ya es tiempo de poner en marcha un verdadero plan nacional de seguridad con la participación y los recursos suficientes para fortalecer las policías civiles de los tres niveles de gobierno”, insistió.
Cortés Mendoza aseguró que la Jornada de Oración por la Paz convocada por la jerarquía católica a partir de este domingo, no es más que un llamado a las conciencias de todos, comenzando por el gobierno federal, para emprender acciones conjuntas que nos permitan frenar el avance de la delincuencia organizada en todo el territorio nacional.
El presidente López Obrador, dijo, debe escuchar el clamor social y presentar a la brevedad un plan de seguridad que sea efectivo, verificable y con presupuesto para las policías estatales y municipales, en el que priorice el salario, la profesionalización, capacitación, equipamiento y coordinación entre los cuerpos policiacos.
“Estamos convencidos de que, sin seguridad, el país no puede avanzar ni habrá crecimiento económico. Con la eliminación de facto que realizó el gobierno de las policías civiles y con la estrategia de abrazos no balazos impuesta a nuestras Fuerzas Armadas, solo se provocó más violencia, pobreza y desigualdad. Aunque solo faltan dos años de este gobierno, creemos que todavía estamos a tiempo de hacer algo por la seguridad de las y los mexicanos”, sostuvo.
El líder panista expresó su total respaldo a la Jornada de Oración por la Paz al afirmar que la convocatoria de la iglesia católica es una iniciativa que comparten muchos sectores de la sociedad que observan con impotencia cómo el crimen les arrebata uno a uno a sus miembros y los tienen amenazados en sus actividades productivas. Con la plena convicción de que sin seguridad el país no puede avanzar ni habrá crecimiento económico y con sobrados elementos estadísticos para poder señalar que este gobierno está generando más violencia, pobreza y desigualdad.
“No hay mexicana o mexicano que no tenga algún familiar que no haya sido víctima de la violencia, por eso le exigimos al gobierno que reconozca que su estrategia ha sido un rotundo fracaso, que se corrija de inmediato y se ponga a trabajar en serio contra los criminales y grupos delictivos que tienen asolada a la sociedad con la complacencia del gobierno”, concluyó.