Taxco a 29 de marzo, 2024.- En una acción decisiva que marca un precedente en la lucha contra la impunidad en casos de feminicidio, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, ha dado un firme paso adelante garantizando justicia para Camila González, una niña de apenas ocho años, cuya vida fue trágicamente arrebatada en el municipio de Taxco. Este desgarrador evento ha causado consternación no solo en la comunidad local sino a nivel nacional, despertando llamados urgentes para una acción gubernamental efectiva y rápida.
En un movimiento que refleja la seriedad con la que se está abordando este caso, la gobernadora Salgado ha manifestado su compromiso con cero impunidad, subrayando la activación del «Protocolo Violeta», una estrategia integral diseñada para la búsqueda inmediata de niñas y mujeres desaparecidas en Guerrero. Este protocolo, activado tras la desaparición de Camila, es testimonio del esfuerzo continuo por combatir y prevenir actos de violencia contra mujeres y niñas en la entidad.
A través de comunicados en las redes sociales y en interacciones directas con la prensa, Salgado ha condenado enérgicamente el feminicidio de Camila, calificándolo de «un suceso indignante». Además, ha asegurado que su administración ha estado en contacto constante con la familia de Camila, brindando el apoyo necesario en estos momentos de inimaginable dolor.
Además de la movilización inmediata de recursos bajo el Protocolo Violeta, Salgado ha solicitado a la Fiscalía General del Estado de Guerrero una investigación expedita y efectiva, con el fin de llevar a los responsables ante la justicia. Este llamado a la acción no solo subraya la urgencia y la seriedad con las que se está tratando el caso, sino que también refleja un compromiso más amplio con la erradicación de la violencia de género en Guerrero.
Este trágico evento ha reavivado el debate sobre la eficacia de las medidas de protección para mujeres y niñas en México y la necesidad de una implementación más efectiva de políticas que garanticen su seguridad. La promesa de justicia de la gobernadora Salgado representa un faro de esperanza en la búsqueda de un futuro en el que tales actos de violencia sean relegados al pasado.