¿Está la IA Redefiniendo el Derecho? Un Debate en la UNAM
La inteligencia artificial (IA) ha llegado para transformar diversos campos, y la enseñanza del derecho y la investigación jurídica no son la excepción. Durante el XII Congreso Internacional sobre Enseñanza del Derecho y Metodología de la Investigación Jurídica, celebrado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, expertos destacaron tanto las oportunidades como los retos que plantea esta revolución tecnológica.
Mónica González Contró, directora del IIJ, enfatizó que la IA tiene un gran potencial como herramienta en la enseñanza del derecho, pero advirtió que debemos ser cautelosos. «Puede ser una valiosa herramienta, pero debemos evitar que los riesgos se apoderen de las conciencias», afirmó. Entre los riesgos, destacó los peligros laborales, los algoritmos sesgados y la burbuja de información generada por la tecnología, donde las personas pueden verse atrapadas en una visión unívoca de la realidad. Además, alertó sobre la amenaza que representa para la protección de los datos personales en un mundo cada vez más conectado con la IA.
Por su parte, Sonia Venegas Álvarez, directora de la Facultad de Derecho de la UNAM, subrayó que la IA está redefiniendo los métodos de enseñanza y de investigación en el ámbito jurídico. «Nos encontramos ante una transformación que ya no es un horizonte lejano, sino una realidad que permea todas nuestras disciplinas», indicó. Venegas Álvarez destacó la relevancia del congreso, no solo por la oportunidad de debatir estos temas, sino por el regreso a la presencialidad, que permite un intercambio directo de ideas y conocimientos en la construcción del derecho.
Sin embargo, no todos los expertos compartieron una visión completamente optimista. Enrique Cáceres Nieto, investigador del IIJ y coordinador del evento, expresó su preocupación por el «hechizo de la IA generativa». «Nuestros estudiantes se encuentran en el riesgo de caer en las manos de piratas del secuestro intelectual y la manipulación subliminal», alertó. Cáceres Nieto destacó el riesgo de que los estudiantes cedan sus procesos cognitivos a los algoritmos, lo que podría minar la exigencia epistémica necesaria para aceptar la verdad en el ámbito jurídico.
Marisol Anglés Hernández, coordinadora del Posgrado en Derecho, también reconoció los avances tecnológicos y la utilidad de la IA, pero hizo un llamado a tratar este tema con mayor cuidado. «Detrás de todo asunto jurídico hay una persona, su familia, patrimonio, vida, integridad y seguridad», destacó, recordando que, a pesar del potencial de la tecnología, la humanidad debe seguir siendo el centro de toda reflexión jurídica.
El XII Congreso no solo incluyó conferencias magistrales sobre los desafíos de la IA, sino también cursos prácticos sobre herramientas tecnológicas. Con estos enfoques, se busca asegurar que la inteligencia artificial se integre a la enseñanza del derecho de manera ética y responsable, sin perder de vista los valores fundamentales que deben regir la profesión.
En resumen, la inteligencia artificial tiene el potencial de transformar profundamente la enseñanza del derecho y la investigación jurídica, pero para que esta transformación sea positiva, es necesario integrar esta tecnología con responsabilidad, ética y una profunda conciencia de los riesgos involucrados.