El Día de Muertos, una festividad profundamente arraigada en la cultura mexicana, se ha convertido en un momento especial para honrar la memoria de las leyendas deportivas que han partido recientemente. A lo largo del tiempo, hemos perdido a figuras icónicas cuyas hazañas y carisma dejaron una huella imborrable en el mundo del deporte. En este día, recordamos y celebramos sus contribuciones a través de generaciones.
Pelé: El legendario futbolista brasileño, considerado uno de los mejores jugadores de la historia, nos dejó el 29 de diciembre de 2022 a los 82 años debido a un cáncer de colon. Pelé, famoso por su habilidad excepcional con el balón, ganó tres Copas del Mundo con Brasil y es un ícono del fútbol.
Diego Armando Maradona: El eterno astro argentino falleció el 25 de noviembre de 2020, dejando tras de sí un legado indiscutible en el fútbol. Conocido por su «Mano de Dios» y su «Gol del Siglo» en el Mundial de 1986, Maradona es considerado uno de los futbolistas más carismáticos y talentosos de todos los tiempos.
Johan Cruyff: El legendario futbolista y entrenador neerlandés, conocido por su influencia en el «fútbol total», falleció el 24 de marzo de 2016. Cruyff dejó su marca en el FC Barcelona como jugador y entrenador, transformando el club en una potencia mundial.
Kobe Bryant: La trágica pérdida de Kobe Bryant el 26 de enero de 2020 conmovió al mundo del baloncesto. El cinco veces campeón de la NBA con los Los Angeles Lakers es recordado por su ética de trabajo incansable y su legado duradero en el deporte.
Muhammad Ali: El «Más Grande» falleció el 3 de junio de 2016. Ali no solo fue uno de los boxeadores más grandes de todos los tiempos, sino también un activista y defensor de los derechos civiles. Su legado trasciende el cuadrilátero.
Estos atletas extraordinarios dejaron una huella imborrable en el mundo del deporte y continúan siendo recordados y venerados en todo el mundo. Sus hazañas deportivas y su influencia en la cultura trascienden el tiempo y generaciones, y en este Día de Muertos, se les rinde un sincero homenaje. Sus nombres seguirán resonando en el corazón de los amantes del deporte, recordándonos que las leyendas nunca mueren.