Por Bruno Cortés
En un contexto de creciente tensión política en México, el diputado Rubén Moreira Valdez, coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, alzó la voz para cuestionar la respuesta del gobierno federal ante las recientes medidas arancelarias impuestas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En lugar de una respuesta institucional que busque la unidad nacional, Moreira destacó que la propuesta de la presidenta de convocar una asamblea en el Zócalo el próximo domingo no aborda el problema de fondo.
“Van a recurrir al expediente de ir al Zócalo, están en su derecho, pero no genera unidad nacional, el país está dividido”, señaló el legislador en una conferencia de prensa, acompañado por varios miembros de su fracción. Además, lamentó que se utilice este tipo de situaciones como una estrategia para posicionarse electoralmente, en lugar de aprovechar la crisis para lograr acuerdos y soluciones que involucren a todos los sectores políticos del país.
Con una postura crítica, Moreira Valdez subrayó que lo que México necesita en este momento es una reflexión profunda de su gobierno. “Un gobierno de una nación, no de un partido, debe convocar a los opositores, no solamente a los partidos políticos, sino también a las fuerzas de las Cámaras y hacer una pausa en la destrucción de las instituciones”, insistió.
En cuanto a la política interna, el PRI continúa defendiendo a las y los trabajadores del Estado, un tema que ha sido una de sus principales banderas. En ese sentido, el PRI no acompaña la “política errática” del Gobierno Federal, pero reconoce que los gobernadores que respaldan al presidente forman parte de un pacto federal y que sus circunstancias son distintas. La reflexión de Moreira también se centró en los 96 años de historia del PRI, que celebró recientemente su fundación. “Llegamos con la dignidad de siempre, con la razón y con la certeza de que todo lo que estuvimos diciendo estos seis años se está cumpliendo”, afirmó.
En otro tema crucial, el PRI continúa luchando contra la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicio Social de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). El diputado Luis Gerardo Sánchez Sánchez, secretario de la Comisión de Seguridad Social, destacó los riesgos que la reforma representaría para los trabajadores, quienes verían un incremento en los cobros a sus pensiones y un impacto en su economía familiar.
La reforma, según Sánchez, propone un sistema injusto al imponer impuestos sobre el sueldo base más las compensaciones de los trabajadores, pero para su pensión solo se toma en cuenta el sueldo base. Esto significa que aquellos trabajadores con sueldos más altos terminarían pagando más, sin recibir un beneficio proporcional en sus pensiones. El PRI considera que esta reforma es un “botín político” que beneficia las finanzas de la Federación, pero a costa de los trabajadores.
Por último, la diputada Ana Isabel González González, secretaria de la Comisión de Salud, también fue consultada sobre la creciente crisis de salud en el país, particularmente el aumento de casos de tosferina. González denunció que no se está dando la atención adecuada a esta y otras enfermedades, lo que evidencia una crisis de salud pública que necesita ser atendida con urgencia.
Así, en un clima de divisiones internas y enfrentamientos políticos, los legisladores del PRI siguen con su lucha por defender los intereses de los trabajadores y cuestionar las decisiones del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, mientras el país atraviesa momentos complicados tanto a nivel nacional como internacional.