En los últimos años, una nueva tendencia estética ha comenzado a ganar popularidad: la modificación del color de los ojos a través de procedimientos quirúrgicos. Sin embargo, tanto médicos como autoridades sanitarias han levantado la voz de alerta sobre los peligros de estas prácticas. Una de las técnicas más controversiales es la queratopigmentación, que implica tatuar la córnea para cambiar radicalmente el tono del iris. Aunque este procedimiento es realizado por profesionales de la salud, estudios han demostrado que presenta altos riesgos de peligrosidad y puede tener consecuencias graves para los pacientes.
¿Cuáles son los riesgos del cambio de color de ojos?
El cambio de color de ojos puede traer consigo complicaciones serias. Un informe reciente reveló que muchos de estos procedimientos no están aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA). Los pacientes han reportado efectos secundarios como glaucoma, pérdida de visión, sensibilidad a la luz, e incluso ceguera. Los oftalmólogos Guillermo Amescua y Alexander Movshovich, en una entrevista con USA Today, explicaron que estos efectos pueden manifestarse de inmediato o años después de la cirugía, y en casos severos, pueden llevar a cuadros de depresión debido al impacto en la calidad de vida del paciente.
El costo de la queratopigmentación
Este procedimiento no solo es arriesgado, sino también costoso. Según datos de una reconocida clínica de Nueva York, el precio de la queratopigmentación puede alcanzar los 12,000 dólares. Además, debido a que no todas las clínicas en Estados Unidos han aprobado este tipo de cirugía, algunas personas optan por viajar a otros países para someterse a esta controvertida operación.
Advertencias de la Academia Estadounidense de Oftalmología
La Academia Estadounidense de Oftalmología ha emitido advertencias sobre dos tipos de cirugías de cambio de color de ojos que se han vuelto populares: la cirugía de implante de iris y la cirugía láser para insertar pigmento en la córnea. Ambas presentan riesgos significativos, incluyendo pérdida de visión y otras complicaciones graves como infecciones, glaucoma, cataratas y reacciones alérgicas.
¿Qué dicen los expertos?
Los especialistas insisten en que, aunque el deseo de cambiar el color de los ojos por razones estéticas puede ser fuerte, los riesgos asociados con estos procedimientos son elevados. La Academia insta a las personas a ser plenamente conscientes de los posibles daños y a considerar estos riesgos frente a cualquier beneficio estético percibido. La mayoría de los oftalmólogos no recomiendan estas técnicas para personas con ojos sanos, subrayando la importancia de priorizar la salud visual sobre las modas pasajeras.
Conclusión: un riesgo que no vale la pena
Alterar el color de los ojos puede parecer una opción atractiva para quienes buscan un cambio estético, pero los riesgos potenciales para la salud ocular son considerables. Antes de decidir someterse a una de estas cirugías, es crucial estar bien informado y considerar las graves consecuencias que podrían seguir. La salud visual es invaluable, y protegerla debe ser siempre la prioridad.