El PAN se renueva: Adriana Dávila y Jorge Romero son los candidatos a la dirigencia
Por Juan Pablo Ojeda
El proceso de renovación en el Partido Acción Nacional (PAN) está tomando forma, y el futuro de la dirigencia podría estar en manos de dos exdiputados: Adriana Dávila y Jorge Romero. Este cambio se produce en un contexto donde la administración de Marko Cortés parece quedar atrás. De los tres militantes que inicialmente mostraron interés en la dirigencia, solo Dávila y Romero siguen en la contienda, mientras que Damián Zepeda decidió retirarse, manifestando su descontento con un proceso que no involucra a la ciudadanía en la toma de decisiones.
Ambos candidatos han cumplido con el requisito de entregar las firmas necesarias ante la Comisión Organizadora Nacional de la Elección del Comité Ejecutivo Nacional (CONECEN). Ahora, esas firmas deberán ser validadas para que puedan avanzar en el proceso. Una vez que esto suceda, Dávila y Romero tendrán 45 días para hacer campaña a nivel nacional, buscando atraer la simpatía de los militantes, y participarán en un debate obligatorio en octubre, aunque aún no se ha anunciado la fecha.
Esta renovación no se limita solo a la dirigencia nacional; también incluye la reestructuración de los 32 comités estatales del PAN. En medio de esta dinámica, el senador Ricardo Anaya ha manifestado su apoyo a Jorge Romero, subrayando la necesidad de una reforma a los estatutos del partido que permita una mayor apertura hacia la ciudadanía. Anaya enfatizó que esta puede ser «la última oportunidad» para que el PAN se reestructure y se convierta en un verdadero instrumento al servicio de los ciudadanos. Según él, Romero posee el liderazgo necesario para convocar una Asamblea Nacional que impulse esos cambios fundamentales.
La atmósfera dentro del partido es de expectación y esperanza, ya que la militancia busca una dirección que responda a las demandas actuales del país y del electorado. Con la llegada de Dávila y Romero a la contienda, el futuro del PAN podría estar en una encrucijada, donde la modernización y la inclusión se presentan como elementos clave para su supervivencia política.