CDMX, 27 de septiembre del 2023.- La emblemática plaza de Times Square, ubicada en el corazón de Nueva York, es conocida por ser un escenario lleno de pantallas gigantes que proyectan anuncios de marcas reconocidas a nivel mundial. Sin embargo, recientemente, fue el turno de un rostro mexicano que causó revuelo: Claudia Sheinbaum, aspirante a la presidencia de México. Las imágenes promocionándola en sus aspiraciones presidenciales para 2024 inundaron las pantallas, dejando a muchos preguntándose: ¿Quién pagó por esos anuncios?
Sheinbaum, actualmente uno de los nombres más prominentes en la política mexicana y miembro del partido Morena, afirmó desconocer por completo la procedencia de dichos anuncios y se comprometió a investigar el asunto. Mientras que la respuesta oficial de la política mexicana busca deslindar responsabilidades, el Partido Acción Nacional (PAN) ha tomado cartas en el asunto.
Según Víctor Hugo Sondón, representante del PAN ante el Instituto Nacional Electoral (INE), estos anuncios buscan posicionar a Sheinbaum ante el electorado mexicano residente en Estados Unidos, configurando un acto anticipado de precampaña, e incluso de campaña. Con tales argumentos, el PAN presentó una denuncia ante la Comisión de Quejas y Denuncias del INE, exigiendo medidas cautelares y el cese inmediato de la difusión de dicha propaganda. Además, solicitaron que se inicie el proceso sancionador correspondiente e investigue el origen y el monto de los recursos utilizados en la contratación de la publicidad.
Para añadir a la controversia, las imágenes pro-Sheinbaum se publicaron en espacios de la empresa TSX. Según la guía de esta empresa, se establece una prohibición expresa de colocar videos con mensajes políticos o religiosos. Los 15 segundos en su pantalla, por cierto, tienen un costo de 40 dólares.
Este incidente resalta no solo la importancia y el impacto que la política mexicana puede tener fuera de sus fronteras, sino también las intrincadas y a menudo polémicas dinámicas de las precampañas. Mientras se espera una respuesta del INE y se desentrañan los misterios detrás del financiamiento de estos anuncios, una cosa es cierta: la carrera hacia las elecciones presidenciales de 2024 en México ya está generando titulares a nivel internacional.