Ismael «El Mayo» Zambada, uno de los líderes más poderosos del Cártel de Sinaloa, ha sido trasladado a Nueva York para enfrentar un juicio que podría cambiar el panorama del narcotráfico en México y Estados Unidos. Con 21 cargos en su contra, que incluyen tráfico de drogas, posesión de armas y lavado de dinero, este proceso podría traer sorpresas no solo sobre el cártel, sino también sobre las conexiones que este pueda tener con políticos.
¿Por qué Zambada es importante?
«El Mayo» Zambada no es cualquier narcotraficante. Es uno de los cofundadores del Cártel de Sinaloa y, durante años, ha sido una figura clave en la organización criminal más grande de México. Se le acusa de haber coordinado la distribución de drogas como cocaína, heroína, marihuana y fentanilo, este último relacionado con la crisis de opioides en Estados Unidos.
¿Qué está pasando en Sinaloa?
El arresto y traslado de Zambada a Nueva York no ha sido bien recibido en su tierra natal, Sinaloa. Desde que él y otros líderes del cártel fueron detenidos, la violencia en el estado ha aumentado considerablemente. Se cree que esto es consecuencia de una lucha interna por el control del cártel, donde los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán, conocidos como «Los Chapitos», y los leales a Zambada se disputan el poder.
La situación ha llevado al gobierno de EE.UU. a emitir alertas de viaje, recomendando a sus ciudadanos que eviten visitar Sinaloa debido a la inestabilidad y la violencia que vive la región.
¿Qué sigue?
La primera audiencia de Zambada está programada para mañana, y es probable que se revelen detalles clave sobre las operaciones del Cártel de Sinaloa y sus conexiones con otras organizaciones criminales y figuras políticas. Este juicio no solo impactará al futuro del cártel, sino que también podría influir en las políticas de seguridad tanto en México como en Estados Unidos.