En un mundo donde la pandemia de COVID-19 ha redefinido las normas laborales, el trabajo remoto ha emergido no solo como una necesidad, sino como una preferencia para muchos. Un estudio exhaustivo realizado por la Universidad del Sur de Australia ha arrojado luz sobre los efectos del teletrabajo en la vida de las personas, revelando que trabajar desde casa puede, de hecho, hacernos más felices.
El impacto del teletrabajo en la salud mental y física
El estudio, que comenzó antes de la pandemia y se extendió por cuatro años, examinó el estilo de vida y el bienestar de adultos australianos, observando cambios significativos desde el inicio del confinamiento. Los resultados indicaron que las personas que trabajaban desde casa dormían casi media hora más y tendían a consumir más alcohol. A pesar de algunos datos contradictorios, el estudio concluyó que la flexibilidad de trabajar desde casa era beneficiosa tanto para la salud física como mental de los trabajadores.
Menos tiempo en traslados, más tiempo para el ocio
Antes de la pandemia, un australiano promedio gastaba 4.5 horas a la semana desplazándose al trabajo. El estudio sugiere que el tiempo ahorrado al evitar el transporte público se ha utilizado no solo para trabajar más, sino también para dedicarse a actividades de ocio, cambiar hábitos alimenticios hacia opciones más saludables y, en general, mejorar la calidad de vida.
Los Desafíos del Teletrabajo
A pesar de sus beneficios, el teletrabajo también presenta desafíos, como el aislamiento laboral, que el 83% de los entrevistados señaló como un deterioro en las relaciones con sus compañeros de trabajo.
Además, existe la preocupación de que trabajar desde casa pueda afectar negativamente la cohesión y colaboración en equipo, así como las oportunidades de promoción.
Sin embargo, el estudio también indica que el rendimiento laboral y la productividad pueden mantenerse estables o incluso mejorar cuando se trabaja desde casa, y que aquellos que trabajan a tiempo completo en casa o en un modelo híbrido reportan una mayor satisfacción laboral y bienestar.
El estudio concluye que el trabajo desde casa «parece estar posicionado como una opción entre muchas otras para apoyar un mejor entorno laboral, más inclusivo y flexible», a pesar de la preferencia de algunos jefes por el trabajo presencial.
Esto sugiere un cambio hacia un futuro laboral más flexible, donde el bienestar de los empleados se coloca en el centro de las políticas laborales.