En el marco de su viaje a Bolivia, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, realizó, en compañía de su homólogo boliviano, Rogelio Mayta, una visita al salar de Uyuni, desierto que cuenta con la mayor reserva de litio tipo salmuera en el mundo.
Durante su estancia, el alcalde del Gobierno Autónomo Municipal de Uyuni, Eusebio López Martínez, entregó al secretario Ebrard la Declaratoria de Huésped Ilustre, así como las llaves de la ciudad de Uyuni, como muestra de los lazos de amistad y cooperación que unen a ambos pueblos.
“México, como Bolivia, y especialmente Uyuni, cuenta con grandes reservas de litio, un mineral estratégico que será prioritario en el futuro de la electro movilidad global”, dijo el canciller Ebrard.
“Nuestros países y la región tenemos un gran desafío para aprovechar las enormes posibilidades que ofrece y enfrentar esta oportunidad como región unida para posicionarnos mejor a nivel internacional”, añadió.
Junto con el ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia y el presidente ejecutivo de Yacimientos de Litio Bolivianos, Carlos Ramos Mamani, el canciller Ebrard recorrió el complejo industrial de Yacimientos de Litio Boliviano (YLB), para conocer el funcionamiento de las cuatro plantas que componen el complejo industrial: la Planta de Producción de Sales (piscinas), la Planta Industrial de Cloruro de Potasio y almacenes de producto terminado, la construcción de la Planta Industrial de Carbonato de Litio y las instalaciones de la Planta Piloto de Baterías de Ion Litio.
Este encuentro y las conversaciones con funcionarios de ese país permitirá impulsar la cooperación entre ambos países en materia de litio, y aprovechar la experiencia boliviana en el ciclo productivo, distribución y comercialización de este mineral estratégico, promoviendo el diálogo y cooperación regional con otros países con reservas.
Durante el recorrido, los funcionarios de México y Bolivia reiteraron el compromiso de redoblar esfuerzos para concluir las negociaciones de los nuevos instrumentos jurídicos derivados de la Carta de Intención de 2021 entre México y Bolivia: un Convenio Marco entre el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y Yacimientos de Litio Bolivianos, y un Memorándum de Entendimiento entre la Secretaría de Energía de México y el Ministerio de Hidrocarburos y Energías de Bolivia para la creación del Instituto Binacional Mexicano-Boliviano para la cooperación en materia de litio.
Igualmente, se coincidió en la importancia de fomentar espacios de análisis y reflexión con otros países latinoamericanos que cuenten con reservas de litio, con el objetivo de promover una mayor integración y complementariedad regional como parte de las etapas de desarrollo de este mineral: exploratoria, productiva, extracción, exploración, y comercialización.
Para ello, México impulsará la creación de un mecanismo informal o foro permanente de diálogo y cooperación regional, con capacidad de incidir en los precios internacionales.
Bolivia invitó a México a participar en el Primer Congreso Internacional del Litio, que tendrá lugar en el país sudamericano en noviembre próximo, en el que se prevé la asistencia de autoridades competentes de la región y otros socios extrarregionales.
Basándose en la vasta experiencia de Bolivia, México buscará la fabricación conjunta de baterías de litio. Ambos países coincidieron en que los compuestos de litio son elementos clave para la transición energética global, incluyendo la electromovilidad, ya que la demanda internacional de este mineral ha aumentado exponencialmente.
América Latina es un actor estratégico en este mineral al concentrar más del 62% de las reservas mundiales de litio, donde Bolivia ocupa el primer lugar en Latinoamérica de las reservas en salmueras, mientras que México se encuentra entre los primeros cinco países con reservas de litio en la región y en un proceso inicial de creación de una empresa estatal para la exploración y explotación de litio.