Amigos melómanos y curiosos del arte clásico, ¿se imaginan escuchar dos de las misas de réquiem más famosas del mundo en una sola noche? Pues prepárense, porque el Coro y la Filarmónica de las Artes lo hacen realidad por segunda vez en un concierto histórico que promete sacudir el alma y llenar el espíritu, justo en las fechas del Día de Muertos. ¡Es un evento que no se pueden perder!
El Día de Muertos es una fecha con un significado único en México, y este año, la música se vuelve el puente perfecto entre lo terrenal y lo espiritual. La Filarmónica de las Artes, en conjunto con su coro, se lanza a una misión musical épica: interpretar, en un solo concierto, los réquiems de dos titanes de la música clásica, Giuseppe Verdi y Wolfgang Amadeus Mozart.
Imagínate la escena: estás en el Centro Cultural Ollin Yoliztli, uno de los recintos con mejor acústica de la ciudad. Las luces se apagan, el murmullo se desvanece, y de pronto, las notas solemnes del Réquiem de Verdi llenan el aire. Es una de esas obras que te pone la piel chinita desde el primer acorde. Verdi compuso esta misa en 1874 como homenaje al poeta italiano Alessandro Manzoni, y su música refleja todo el dolor, la gloria y la esperanza que rodea a la muerte.
Pero eso no es todo, el mismo evento también trae el famoso Réquiem en re menor de Mozart. Una obra que lleva consigo un aura de misterio. Mozart no pudo terminarla debido a su muerte prematura en 1791, a los 35 años, y uno de sus alumnos completó la pieza. Esta obra es tan poderosa que se siente como si estuvieras escuchando a Mozart componer para su propia despedida. Y todo esto, bajo la batuta del maestro Enrique Patrón Rueda, quien celebra nada menos que 45 años de trayectoria dirigiendo a grandes orquestas. ¡Toda una leyenda!
Este concierto no solo es un tributo al Día de Muertos, sino también a la música como una forma de conectarnos con lo intangible. Es una cita imperdible para los amantes de la música clásica y para quienes buscan vivir una experiencia cultural única en estas fechas tan especiales. Dos réquiems, una noche, y un escenario épico. No lo pienses más y lánzate a disfrutar de esta joya musical.