Por Juan Pablo Ojeda
Isidro Cortés Jiménez, director de Seguridad del Municipio de Texcaltitlán, Estado de México, se suicidó el pasado 22 de noviembre de 2024, utilizando su arma de fuego, en un dramático suceso que tuvo lugar durante el operativo conocido como Operación Enjambre. Este operativo fue llevado a cabo por agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y fuerzas estatales con el objetivo de desmantelar redes de corrupción y criminalidad en la región.
Contexto del Suicidio
Los hechos se desarrollaron cuando Cortés fue notificado sobre la lectura de sus derechos como presunto cómplice de actividades delictivas relacionadas con el grupo criminal La Familia. En ese momento, las autoridades le solicitaron que entregara su arma. Sin embargo, en un acto desesperado, Cortés tomó su pistola y se disparó en la cabeza, frente a los agentes que estaban a punto de arrestarlo. Este trágico evento fue grabado en video y ha generado gran conmoción en la comunidad y en los medios de comunicación.
#ASÍ: Le estaban notificando su detención, leyéndose sus derechos. Le pidieron que entregara su arma de cargo y prefirió matarse.
Es Isidro Cortés, director de seguridad pública de #Texcaltitlán. #Edomexazo #OperaciónEnjmbre
Video: @c4jimenez pic.twitter.com/c7gKBJvqQp
— Carlos Zúñiga Pérez (@Carloszup) November 23, 2024
Implicaciones del Operativo
La Operación Enjambre se llevó a cabo con el respaldo de diversas instituciones de seguridad, incluyendo la Guardia Nacional y la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA). Este operativo tenía como objetivo la detención de varios funcionarios públicos implicados en actividades ilícitas, incluyendo extorsión y secuestro. Se reporta que Cortés estaba programado para ser relevado de su cargo en enero debido a un cambio administrativo.
Reacciones y Consecuencias
El suicidio de Isidro Cortés ha suscitado un debate sobre la corrupción dentro de las fuerzas policiales en México y la presión a la que están sometidos los funcionarios públicos involucrados en el combate al crimen organizado. La comunidad local ha expresado su preocupación por el ambiente de violencia e impunidad que prevalece en Texcaltitlán, una zona crítica bajo el control del crimen organizado.
