CDMX a 11 de septiembre, 2024.- Diputados del Partido Acción Nacional (PAN) denunciaron que la policía de la Ciudad de México, bajo órdenes del jefe de Gobierno Martí Batres, utilizó gas lacrimógeno y golpeó a manifestantes, incluyendo mujeres, para evitar que la prensa registrara los actos de violencia durante una protesta contra la reforma judicial. Los legisladores Federico Döring Casar y Héctor Saúl Téllez Hernández, quienes estuvieron presentes en el lugar, calificaron las acciones policiales como «represivas» y dirigidas a silenciar a quienes no comparten las políticas del partido Morena.
Según los diputados, los manifestantes, entre los que se encontraban jóvenes, universitarios y trabajadores del Poder Judicial, protestaban pacíficamente en las inmediaciones de la sede alterna del Senado de la República cuando la policía capitalina los agredió para disolver la protesta. «La policía de Morena amedrenta a quienes piensan diferente. Las órdenes vienen directamente de Martí Batres», señaló Federico Döring.
Döring también calificó como una «bajeza» el hecho de que los policías golpearan a mujeres en las piernas, rodillas y cintura para evitar que la prensa capturara imágenes del ataque. El legislador exigió al secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez, que informe sobre los protocolos ejecutados, identifique a los mandos responsables y sancione a los policías involucrados en la agresión contra civiles, entre los que se encontraban mujeres y adultos mayores.
Los diputados del PAN acusaron a Martí Batres de actuar de manera autoritaria y de enviar grupos de choque para reprimir a los manifestantes, tal como ocurrió recientemente en Xochimilco, cuando se enfrentaron con pobladores de San Gregorio. «La policía capitalina no debe ser manejada por Mario Delgado ni por Sebastián Ramírez para reprimir a quienes no comparten las políticas de Morena», añadió Döring.
Por su parte, Héctor Barrera Marmolejo, exdiputado local y federal panista, señaló que Batres ha demostrado ser un represor y que no está a la altura del cargo de jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Los legisladores del PAN exigieron una reestructuración de la política capitalina y pidieron que se sancione a los responsables de las agresiones. Aseguran que la capital del país no puede permitirse ser gobernada con violencia e intimidación hacia quienes ejercen su derecho a manifestarse pacíficamente.