CDMX a 4 de julio, 2024.- El diputado Manuel Alejandro Robles Gómez (Morena) ha hecho un llamado al Instituto Nacional Electoral (INE) para que presente denuncias por las irregularidades detectadas en el voto de los mexicanos en el extranjero durante las elecciones del pasado 2 de junio. Acompañado por otros legisladores de su partido, Robles Gómez denunció que se utilizaron documentos falsos para inflar el listado nominal y que muchos migrantes quedaron excluidos del sistema de votación.
En una conferencia de prensa realizada en el marco de la Comisión Permanente del Senado de la República, el diputado Robles Gómez explicó que hubo un número mayor de votantes registrados que los efectivamente contabilizados, lo cual señala un uso de documentación falsa. Además, criticó la exclusión de muchos migrantes del sistema de votación.
«El INE debe cumplir su compromiso y presentar las denuncias correspondientes por la alteración del listado nominal de los connacionales en el extranjero», afirmó Robles Gómez.
La diputada Adriana Bustamante Castellanos, vicecoordinadora del Grupo Parlamentario de Morena, respaldó la denuncia de Robles Gómez. Bustamante Castellanos destacó que en Estados Unidos residen más de 38 millones de mexicanos, cuya voz y voto deben ser reconocidos. Señaló la necesidad de crear más oportunidades para estos ciudadanos en el Congreso de la Unión.
Por su parte, el diputado Hamlet García Almaguer subrayó la importancia de contar con un padrón confiable y a prueba de fraudes para garantizar la emisión de votos en el extranjero. «Queremos que en 2030 se pueda dar una votación masiva, pero para ello se requiere de un padrón confiable», dijo García Almaguer.
García Almaguer también mencionó que han recibido numerosas quejas a través de redes sociales, correo electrónico y de manera presencial en el INE. Los votantes en el extranjero señalaron diversas irregularidades, incluida la falta de capacidad del personal adscrito para acompañar la votación. En algunos consulados, el personal no hablaba inglés, lo que dificultó la interlocución con las autoridades policiales de Estados Unidos y generó desorden.