CDMX a 11 de septiembre, 2022.- La senadora Geovanna Bañuelos de la Torre planteó modificar diversos artículos de la Ley General de Educación, para que la Secretaría de Educación Pública fomente programas de capacitación, educación, información y orientación sobre temas de salud mental y de reconocimiento de población en situación de riesgo de suicidio.
Lo anterior, en coordinación con autoridades del sector Salud y representantes de los sectores social y privado.
Además, propuso que en los programas del Sistema Educativo Nacional se realicen con un enfoque de salud comunitaria y de derechos humanos, y que en la orientación integral de las y los mexicanos se consideren las habilidades socioemocionales de superación y resolución de problemas, el desarrollo de la imaginación y la creatividad de contenidos y formas.
También que se incluya el respeto por los otros; la colaboración y el trabajo en equipo; la comunicación; el aprendizaje informal; la productividad; capacidad de iniciativa, resiliencia, responsabilidad; trabajo en red y empatía; gestión y organización.
La senadora por el estado de Zacatecas presentó con ese motivo una iniciativa con proyecto de decreto para reformar los artículos 18, 26, 30, 41, 73 y 115 de la Ley General de Educación.
Esos cambios, señaló, deberán fomentar una educación socioemocional centrada en el fortalecimiento de la autoestima, la autonomía, la resiliencia, el respeto y la tolerancia de cada alumno.
Expuso que la secretaría del ramo, en coordinación con las autoridades del sector salud, así como los sectores social y privado, tienen que fomentar programas de capacitación, educación, información y orientación sobre temas de salud mental, de reconocimiento de factores de riesgo y población en situación de riesgo de suicidio.
La legisladora también propone que en la impartición de educación para menores de dieciocho años se tomen medidas que aseguren al educando la protección y el cuidado necesarios para preservar su integridad física, psicológica y social sobre la base del respeto a su dignidad y derechos, y que la aplicación de la disciplina escolar sea compatible con su edad, de conformidad con los lineamientos que para tal efecto se establezcan.