En las vastas y desoladas tierras al sureste del lago Colhué Huapi, en la provincia de Chubut, un equipo de investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) ha realizado un descubrimiento sin precedentes en América del Sur: los restos de un perro utilizado como animal de carga. Este hallazgo se produjo cerca de Sarmiento, desvelando aspectos desconocidos de las sociedades cazadoras-recolectoras que una vez vagaron por esta parte de la Patagonia.
Durante una meticulosa campaña de excavación, los expertos encontraron el esqueleto de un cánido macho de entre 2 y 3 años, en un estado notable de conservación. Las pruebas osteológicas y genéticas indican que el animal vivió en el siglo XVII, aportando a la historia genética poblacional de Canis familiaris a nivel global.
Los análisis revelaron que las deformaciones encontradas en las vértebras del perro eran consecuencia del estrés físico generado por la carga de objetos pesados sobre su columna vertebral. Este detalle sugiere que los perros no solo acompañaban a los cazadores-recolectores en sus desplazamientos sino que también desempeñaban un papel activo en el transporte de bienes.
Este estudio, publicado en la revista ‘Journal of Archaeological Science: Reports’, no solo arroja luz sobre la función de los perros en estas comunidades antiguas sino que también plantea preguntas sobre la domesticación y el uso de animales en las culturas precolombinas de Sudamérica.