CDMX a 29 de marzo, 2024.- La política mexicana se ve nuevamente sacudida por acusaciones de una guerra sucia en las redes sociales, apuntando hacia una batalla digital que parece estar diseñada para influir en las percepciones y decisiones del electorado mexicano. Julián Macías, un reconocido activista y analista digital español, ha sacado a la luz acusaciones que involucran a entidades y personalidades de peso como Atlas Network, CLS Strategics, y el magnate Ricardo Salinas Pliego, en una campaña de desinformación y ataques dirigidos contra el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y, posiblemente, contra la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum.
En una entrevista con el periódico La Jornada, Macías desglosó cómo estas organizaciones y grupos vinculados a la ultraderecha han operado en Latinoamérica, intentando desestabilizar gobiernos de izquierda, con Bolivia como ejemplo reciente en los ataques contra Evo Morales. Según el análisis de Macías, la presencia de entidades como Atlas Network en estas campañas antidemocráticas no es nueva, y su operación en México, junto con CLS Strategics y figuras como Salinas Pliego, busca intensificar sus esfuerzos conforme se acercan las elecciones 2024.
La implicación de estos grupos en la política mexicana no es un fenómeno aislado. Casos anteriores, como el triunfo de Enrique Peña Nieto en 2012 y la contratación de CLS Strategics, demuestran cómo la influencia digital se ha convertido en un arma poderosa dentro de la arena política. Las acusaciones de Macías también sugieren una conexión entre la candidata presidencial Xóchitl Gálvez y estas redes, señalando sus viajes a Estados Unidos y España, donde se reunió con figuras y organizaciones vinculadas a Atlas Network.
Estas revelaciones plantean preguntas profundas sobre la integridad del proceso electoral en México y el papel que juegan las redes sociales y las campañas de desinformación en la configuración del discurso político. La guerra sucia, según Macías, no solo apunta a desacreditar a AMLO y sus aliados, sino también a socavar la confianza en las instituciones democráticas del país.
A medida que México se acerca a un momento crítico en su historia política, la necesidad de transparencia y vigilancia se hace más evidente. La intervención de grupos nacionales e internacionales en la política mexicana a través de las redes sociales desafía la autonomía del proceso democrático y exige una respuesta firme de la sociedad civil y las autoridades para proteger la integridad de las elecciones.