Diputadas y diputados del PAN, PRI y PRD señalaron la necesidad de destinar más presupuesto para atender de manera integral a las víctimas de ataques con ácido o cualquier otro agente corrosivo, las cuales, subrayaron, requieren asistencia legal, de salud y apoyo económico, así como acceso a la justicia.
Asimismo, durante el foro «La voz de las víctimas de los ataques con ácido», llamaron al Senado de la República a romper el “pacto patriarcal” y avalar la minuta de la Cámara de Diputados que equipara los ataques con ácido como feminicidio en grado de tentativa y castiga hasta con 22 años de prisión a los agresores.
La diputada Jaqueline Hinojosa Madrigal (PRI) pidió a la senadora Olga Sánchez Cordero (Morena) romper el «pacto patriarcal», así como que los hombres se deconstruyan para lograr cambiar la realidad de las mujeres y de la sociedad.
Destacó la importancia de que el activismo se involucre en esta lucha, ya que, dijo, pareciera que no es suficiente que ésta sea la Legislatura de la Paridad, la Inclusión y la Diversidad, pues ser mujer no garantiza que se va a legislar con perspectiva de género o que no se van a obedecer órdenes del patriarca que vive en Palacio Nacional.
“Entonces no vamos y no podemos decir que tenemos un México feminista, mientras exista una mujer pidiendo justicia porque todos los días vivimos violencia”, expresó.
El diputado Felipe Fernando Macías Olvera (PAN), presidente de la Comisión de Justicia, destacó que hace unas semanas la Cámara de Diputados aprobó reformas al Código Penal Federal y a la Ley Federal de Víctimas, a fin de crear un nuevo tipo penal que sancionará con la máxima severidad permitida por la ley a quienes cometan ataques con ácido contra mujeres, los cuales tiene una carga simbólica que pretende marcarlas de por vida, avergonzadas y aisladas por sus cicatrices.
Señaló que cuando la lesión o lesiones afecten la cara, el cuello, el brazo, la mano o los órganos sexuales de la víctima, la pena se aumentará hasta en un tercio, en su mínimo y en su máximo y cuando la víctima sea mujer, persona con discapacidad o menor de edad, la pena se aumentará hasta en una mitad.
Indicó que si la lesión o lesiones afectan órganos o funciones vitales, ponen en peligro la vida o más de la mitad del cuerpo se estará a la punibilidad prevista para el homicidio o el feminicidio en grado de tentativa, según corresponda.
También, agregó, se adiciona el artículo 36 de la Ley General de Víctimas, a fin de estipular que a las víctimas de lesiones inferidas con ácido o sustancias similares se garantizará el acceso a cirugías reconstructivas.
“Hoy esta Comisión entrega un granito de arena a este llamado urgente por investigar, sancionar y erradicar la violencia de género y específicamente estos crueles y miserables ataques que se dan con ácido.
“Pero también hay que decirlo, ningún esfuerzo legislativo va a estar completo mientras los ministerios públicos y las fiscalías no hagan su trabajo, porque es ahí, en la procuración de justicia, donde realmente se pueden dar las medidas de protección de la integridad de las mujeres”, dijo.
La diputada priista Carolina Viggiano Austria (PRI) lamentó que en México se susciten ataques a mujeres con sustancias corrosivas, por lo que llamó al Gobierno Federal a incrementar recursos para atender a víctimas que requieren asistencia legal, de salud y apoyo económico, tras ser agredidas.
Refirió que, al año se han registrado mil 500 agresiones de este tipo, donde el 80 por ciento de las víctimas a nivel mundial son mujeres, mientras que en México se trata del 85 por ciento; asimismo, puntualizó que el 40 por ciento de las afectadas no cumplen con la mayoría de edad.
En ese sentido, señaló la necesidad de visibilizar estas agresiones y trabajar para erradicar la revictimización y la indiferencia que hay en las instituciones responsables de la impartición de justicia.
«Son delitos en ascenso y que en su mayoría son contra mujeres. No podemos ser indiferentes ante esta forma de violencia en México. Lo que no se nombra no existe. ¡Basta de discursos, es tiempo de acciones!», expresó.
La legisladora reconoció el trabajo de las diputadas de su bancada Montserrat Arcos, Ana Lilia Herrera, Adriana Campos, Melissa Vargas y Jaqueline Hinojosa, por iniciar el proceso de la iniciativa que busca equiparar las agresiones con ácido como tentativa de feminicidio, el cual fue aprobado recientemente en la Cámara de Diputados.
Por su parte, la diputada Elizabet Pérez Valdez, vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, pidió a las y los senadores romper el «pacto patriarcal» y apoyar las recientes reformas, ya que, aseveró, hay mujeres que sobreviven o intentan sobrevivir todos los días no como víctimas, sino como defensoras emergentes de sus derechos humanos, porque en eso se convierten.
“Afortunadamente hay un dictamen que está en manos del Senado, y si no tenemos la tipificación de feminicidio en grado de tentativa, es muy complicado que cualquier agravante que le pongamos a un ataque hacia una mujer por razón de género, se pueda realmente hacer valer en los juzgados y en las fiscalías y ministerios públicos y todo lo que tiene que ver con la debida integración de una carpeta, el debido proceso, la escucha de los ministerios públicos”, indicó.
Apuntó que, más allá de legislar con perspectiva de género, se requiere actuar con perspectiva de género, y esta misma Legislatura de la Paridad, la Inclusión y la Diversidad, pese a los avances, les ha quedado a deber, por lo que demandó más presupuesto para la atención de las víctimas.
“Somos 250 diputadas y con el voto de un diputado más, un compañero hombre, podemos modificar el presupuesto, pero resulta que la Legislatura de la Paridad, la Inclusión y la Diversidad no ejecuta la paridad en función de pensar en sus mujeres de este país, ante eso lo que nos queda es pedirles una disculpa. Es muy terrible que sigamos legislando por colores y no por ustedes. Es terrible que siga legislando por la mano el patriarca y no por ustedes”, lamentó.
En el foro estuvieron presentes mujeres víctimas de ataques con sustancias corrosivas, quienes relataron sus testimonios y expusieron la falta de justicia y atención por parte de las instituciones responsables para dar seguimiento a sus casos.
La activista Carmen Sánchez manifestó que fue atacada con ácido el 20 de febrero del 2014 y señaló que las sobrevivientes de atentados de este tipo no tienen acceso a atención médica pública, debido a que los procedimientos reconstructivos a los que se tienen que someter son considerados como cirugías estéticas.
Al foro también asistieron las diputadas del PAN, Lizbeth Mata; de Morena, Amairani Peña; la activista feminista Alessandra Rojo de la Vega, fundadora de la organización “No somos una, somos todas” y Ana Saldaña, víctima de ataque con ácido, quién acuso que las sobrevivientes de esta violencia no tienen acceso a atención médica pública, debido a que los procedimientos reconstructivos a los que se tienen que someter son considerados como estéticos.