Por Juan Pablo Ojeda
Un nuevo estudio ha revelado un hallazgo crucial: los fumadores diagnosticados con cáncer tienen entre un 22 y un 26 por ciento menos de probabilidades de morir si deciden dejar de fumar después de su diagnóstico. Este informe, publicado en la edición del 31 de octubre de la revista JAMA Oncology, subraya la importancia de abandonar el tabaco como una intervención vital para mejorar los resultados en pacientes oncológicos.
Los investigadores encontraron que los mejores resultados se producen en aquellos pacientes que logran dejar de fumar en un plazo de seis meses tras el diagnóstico de cáncer y mantienen la abstinencia durante al menos tres meses. El estudio, liderado por Paul Cinciripini, catedrático de ciencias conductuales y director ejecutivo del Programa de Investigación y Tratamiento del Tabaco del Centro Oncológico MD Anderson de la Universidad de Texas, destaca que, aunque se promueve ampliamente el abandono del tabaquismo en los centros oncológicos, muchos oncólogos aún no lo abordan como parte de su atención de rutina.
Cinciripini enfatiza: «Nuestra investigación subraya el rol crítico del abandono temprano del tabaquismo como una intervención clínica clave para los pacientes que se someten a tratamiento contra el cáncer».
El estudio siguió a más de 4,500 fumadores diagnosticados con cáncer que participaban en un programa para dejar de fumar en el MD Anderson, donde se proporcionó la mayoría del apoyo a través de telemedicina. Los resultados fueron impactantes: aquellos que lograron abstenerse del tabaco tuvieron una supervivencia promedio de cuatro años, en comparación con solo dos años para los que continuaron fumando.
«Este es un llamado a la acción para que los expertos, organismos reguladores e instituciones prioricen el abandono del tabaquismo como parte integral de la atención oncológica de primera línea», afirmó Cinciripini. Además, dejar de fumar puede resultar en una mejor calidad de vida y un aumento en la esperanza de vida para aquellos que logran mantenerse alejados del tabaco.
Cinciripini concluye: «Cuanto más temprano se inicia el tratamiento para dejar de fumar, mayor es el impacto en la esperanza de vida del paciente». Para más recursos sobre cómo dejar de fumar, la Sociedad Americana Contra el Cáncer ofrece valiosa información y apoyo.