CDMX a 7 de abril, 2024.- Este domingo 7 de abril marcará un hito en la historia política de México al celebrarse el undécimo debate presidencial, destacando por primera vez la presencia de dos mujeres, Claudia Sheinbaum de “Sigamos Haciendo Historia”, y Xóchitl Gálvez de “Fuerza y Corazón por México”, como las principales contendientes a la presidencia de la República. Este evento, crucial en el proceso electoral, tendrá lugar en las instalaciones del INE, bajo el lema “La sociedad que queremos”.
A tres décadas del primer debate presidencial en México, el escenario político muestra una evolución significativa con dos mujeres al frente de la contienda. En un ambiente cargado de expectativas, los candidatos tendrán la oportunidad de exponer sus propuestas y visiones para el país en temas de vital importancia como educación, salud, transparencia, combate a la corrupción, no discriminación, grupos vulnerables y violencia contra las mujeres.
Según expertos consultados, los debates son una plataforma donde los candidatos pueden destacar sus proyectos y debilidades de los adversarios. Sin embargo, estos no suelen ser decisivos para el resultado electoral. Sheinbaum, como puntera, deberá mantener su posición defendiendo las acciones del actual gobierno y proponiendo soluciones futuras, mientras Gálvez buscará posicionarse como una alternativa viable, destacando falencias y proponiendo cambios. Jorge Álvarez Máynez, por su parte, verá en este debate una oportunidad dorada para darse a conocer y ganar tracción en su campaña.
Un aspecto destacable de este debate es la inclusión de 30 preguntas enviadas por ciudadanos, filtradas de un total de más de 24,000 por no cumplir con requisitos o por duplicidad. Esto otorga un carácter más cercano y relevante a las preocupaciones del electorado, permitiendo que las respuestas de los candidatos resuenen directamente con las inquietudes de la población.
A lo largo de 30 años y diez debates, el panorama electoral mexicano ha demostrado que, aunque estos eventos pueden influir levemente en las preferencias, raramente definen al ganador de la contienda. Sin embargo, en un escenario donde la diferencia entre el primer y segundo lugar es amplia, este primer debate podría ser crucial para definir las estrategias finales de los candidatos en la recta final hacia las elecciones.