Por Juan Pablo Ojeda
Este jueves, el MetLife Stadium fue el escenario de un intenso duelo en la NFL, donde los New York Giants se enfrentaron a los Dallas Cowboys en el primer partido de la semana 4. En un encuentro divisional muy disputado, los Giants no pudieron capitalizar en la zona roja, dejando escapar múltiples oportunidades para anotar touchdowns y conformándose con goles de campo. Esta falta de eficacia resultó fundamental para que el equipo no pudiera competir de manera más efectiva contra Dallas.
Dak Prescott, el mariscal de campo de los Cowboys, tuvo una actuación sólida, lanzando dos pases de anotación y completando un par de goles de campo que resultaron cruciales para la victoria. Aunque el kicker Brandon Aubrey falló un intento de gol de campo en los últimos segundos, Dallas mantuvo la ventaja y ganó el partido por solo cinco puntos.
Con solo 15 segundos en el reloj, los Giants tuvieron una última oportunidad para dar la vuelta al marcador. Daniel Jones lanzó un desesperado Hail Mary, pero la defensa de los Cowboys, liderada por Amani Oruwariye, interceptó el pase, asegurando así la victoria para Dallas.
Los Cowboys ahora se preparan para enfrentar a los Pittsburgh Steelers el próximo domingo 6 de octubre, mientras que los Giants se medirán ante los Halcones Marinos de Seattle en su próximo encuentro. Este partido dejó claro que, aunque el resultado fue apretado, los Giants deben mejorar su desempeño en la zona roja si desean tener éxito en la temporada.