CDMX a 24 de mayo, 2024.- En un tenso cruce de declaraciones, el presidente Andrés Manuel López Obrador y la candidata presidencial Xóchitl Gálvez se han enfrascado en una controversia en torno al lamentable caso del asesinato del niño Emiliano en Tabasco. Las acusaciones han volado en ambas direcciones, dejando al descubierto las profundas divisiones políticas que prevalecen en el país.
Por un lado, AMLO ha arremetido contra Gálvez, tachándola de «inmoral» y «sin escrúpulos» por, supuestamente, intentar «lucrar con el dolor de un niño» al criticar su manejo de la seguridad pública. El mandatario ha acusado a sus adversarios de tener motivos «politiqueros» y de «traficar con el dolor humano».
En respuesta, Xóchitl Gálvez no se ha quedado callada. Durante un mitin en Iztapalapa, la abanderada opositora responsabilizó directamente a AMLO por el asesinato de Emiliano, calificándolo como «una de las cosas más dolorosas» que ha vivido el país. Gálvez criticó duramente la estrategia de seguridad del presidente, afirmando que «dejó crecer a la delincuencia» y cuestionando su lema de «abrazos, no balazos» .
Este amargo enfrentamiento pone de manifiesto las profundas divisiones políticas que persisten en México. Mientras AMLO defiende su gestión y acusa a la oposición de oportunismo, Gálvez y sus aliados lo responsabilizan por el aumento de la violencia y la inseguridad.
En medio de esta tormenta política, la tragedia del pequeño Emiliano se ha convertido en un símbolo de los retos que enfrenta el país en materia de seguridad. Su caso ha reavivado el debate sobre las estrategias para combatir la delincuencia y ha puesto en tela de juicio los logros alcanzados hasta ahora.
A medida que se acercan las elecciones presidenciales, es probable que este tipo de enfrentamientos se intensifiquen. Tanto AMLO como Gálvez buscarán capitalizar el caso de Emiliano para fortalecer sus respectivas narrativas y ganar el favor del electorado. Sin embargo, más allá de las acusaciones cruzadas, lo que México necesita son soluciones concretas y un compromiso genuino para abordar la violencia y la inseguridad que afectan a tantas familias.