Corea del Sur se está preparando para implementar nuevas restricciones que limitan el acceso de vehículos eléctricos con más del 90% de carga a los estacionamientos subterráneos. Esta medida surge tras un incendio provocado por un Mercedes-Benz EQE en Seúl, que dejó más de 20 heridos y dañó alrededor de 140 automóviles, según reporta Nikkei Asia. El gobierno también está considerando limitar la carga rápida de estos vehículos al 80% en Seúl y posiblemente extender esta restricción a los cargadores privados.
Estas medidas han generado controversia tanto entre expertos como entre propietarios de vehículos eléctricos. El profesor Yoon Won-sub, director del centro de baterías de la Universidad de Sungkyunkwan, ha señalado que no existen pruebas concluyentes de que una batería completamente cargada sea más propensa a incendiarse. Yoon también destaca que los vehículos eléctricos están diseñados para no alcanzar una carga total real, incluso si el panel de instrumentos indica que la batería está al 100%. Por ello, considera que las nuevas regulaciones podrían ser una respuesta apresurada más que una solución basada en evidencia.
Los propietarios de vehículos eléctricos en Corea del Sur también han expresado su descontento con la nueva normativa. Muchos argumentan que la restricción del nivel de carga reduce la autonomía de sus vehículos y complica su uso diario. En redes sociales, algunos comparan esta medida con una hipotética limitación en el consumo de combustible para vehículos de gasolina en caso de incendios, una comparación que subraya la percepción de arbitrariedad en las nuevas reglas.
En los últimos tres años, Corea del Sur ha registrado 139 incendios de vehículos eléctricos, lo que ha aumentado las preocupaciones sobre la seguridad de estos automóviles en espacios cerrados. Un aspecto crítico es que los incendios de vehículos eléctricos no pueden extinguirse con métodos tradicionales como agua o espuma. En su lugar, requieren químicos especializados, como retardantes de llamas diseñados específicamente para baterías de litio, que no siempre están disponibles de inmediato, lo que incrementa los riesgos en áreas como los estacionamientos subterráneos.
Con la fecha de implementación de estas medidas acercándose, el debate entre expertos, propietarios de vehículos eléctricos y funcionarios del gobierno continúa. El objetivo es encontrar un equilibrio entre la seguridad y la funcionalidad de los vehículos eléctricos en Corea del Sur.