El ataúd de la Reina Isabel II no volverá a ser abierto debido a que está construido con materiales muy poco comunes.
Uno de los sucesos más importantes de este año alrededor del mundo ha sido la muerte de la Reina Isabel II, y algo que ha llamado la atención en las últimas horas es el féretro en el que descansará su cuerpo por el resto de los días, ante esto, ya se ha revelado de qué está hecho el ataúd y el motivo por el que sea tan especial.
Antes que nada, hay que mencionar que el féretro de la Reina Isabel II tuvo que ser hecho de manera especial debido a que su funeral durará varios días, cabe recordar que su fallecimiento ocurrió el pasado 8 de septiembre y será enterrada hoy lunes 19 de septiembre.
¿De qué está hecho el féretro de la Reina Isabel II?
Según información de diversos medios, el féretro de la Reina Isabel II está hecho con roble inglés y fue mandado a producir hace más de 30 años, por lo que dicha madera es cada vez más difícil de encontrar en la actualidad, sin embargo, esto no es lo que lo hace tan especial, sino que además contiene plomo.
El ataúd real está revestido con plomo para ayudar a que el cuerpo dure más tiempo después del entierro en una cripta, que en el caso de la Reina Isabel II es la Capilla Conmemorativa del Rey Jorge VI en la Capilla de San Jorge en Windsor, que se encuentra al oeste de Londres. Es por ello que el ataúd es más pesado de lo normal, y sus asas de latón están diseñadas para que los guardias puedan sujetarlo con firmeza.
Cabe mencionar que la técnica de enterrar a los miembros de la realeza en féretros revestidos de plomo se remonta a cientos de años, y la Reina Isabel II optó por seguir con la costumbre debido a que el ataúd será depositado en una iglesia, y no será enterrado. Hay que señalar que durante el funeral, el féretro no será abierto, ya que además de ser hermético para preservar el cuerpo tanto como sea posible, también es por seguridad, pues evita que se pueda tomar alguna fotografía de la Reina Isabel II tras su muerte.
Ante ello, por los próximos días, el ataúd solo podrá seguirse viendo como hasta ahora, envuelto con el Estandarte Real, que es la bandera que representa a la soberana y al Reino Unido; y encima del féretro se colocarán el ajuar real, incluyendo el globo, el cetro y la Corona de Estado, la misma que la Reina Isabel II usó para su coronación en 1953.