CDMX, 15 de febrero del 2023.- En el periodo comprendido de 2018 a 2021, el gobierno de Coahuila, encabezado por Miguel Riquelme Solís, asignó un total de 2 mil 178 millones 646 mil 870 pesos a la compra de despensas como parte de los programas de “Apoyo alimentario” y “Apoyo a familias coahuilenses”; no obstante, los contratos favorecieron más a las empresas que la población, cuando su verdadero objetivo era combatir la pobreza.
Según un reportaje realizado por Reporte Índigo, el monto gastado durante los primeros años de Riquelme Solís se ejecutó bajo la justificación de beneficiar a las poblaciones más vulnerables y de escasos recursos. Sin embargo, las licitaciones favorecieron en mayor medida a las cuatro empresas que obtuvieron los contratos en procesos, y que quedaron en la opacidad, de acuerdo con la documentación.
A la par de que el gobierno del priísta realizaba las compras de las despensas, los índices de pobreza y necesidad alimentaria no mostraban números alentadores, pues de acuerdo con datos del último informe de Medición de la Pobreza de 2020 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, la población en pobreza pasó de 6.6% en 2018 a 8.9% en 2020; situación similar que ocurrió con datos de extrema pobreza, cifra que pasó de 1.5% a 2.6 en este mismo periodo.
Incluso, la misma documentación de los contratos revela que durante el tiempo de reparto de las despensas, los puntos con vulnerabilidad alimentaria crecieron en los 38 municipios coahuilenses: en 2018 se reportaron 3,937; en 2019 la cifra incrementó a 4,362; en 2020 alcanzaron los 5,028; y en 2021 aumentó a 5,762.
Pese a estos indicadores, Riquelme continuó con las compras de despensa, la cual inició en mayo de 2018, cuando el gobernador tenía únicamente cinco meses de llegar al cargo. En ese entonces, la Secretaría de Finanzas (Sefin) de la entidad lanzó una licitación nacional para el suministro de las más de 2.5 millones de despensas para el programa “Apoyo Alimentario” de la Secretaría de Inclusión y Desarrollo Social.
Conforme a documentos obtenidos en Compranet, la primera empresa beneficiada por estas licitaciones fue “Despensas y Provisiones de Alimentos”, también conocida como Dypasa, quien ofertó la única propuesta técnica y económica, para suministrar despensas a los 38 municipios del estado, por 504 millones 904 mil pesos.
Asimismo, se presentó la empresa Tekton I+D, quien es señalada por diversos medios como una firma fachada, ya que el giro de este negocio es de tecnología y no de alimentos; sin embargo, en al menos dos concursos se presentó como interesada, aunque no dio ninguna cotización.
El concurso lanzado por Sefin em 2019 tuvo como ganadora a la empresa Grupo Industrial Vida, quien ofreció cubrir los servicios de reparto de despensas por 448 millones 238 mil pesos; la otra razón social con la que compitió fue nuevamente Tekton I+D. Las siguientes licitaciones se dieron bajo la figura de “otras contrataciones”; forma en la que las entidades del gobierno no revelan si existió un procedimiento de competencia (licitación pública), si se llamó a tres empresas o si se adjudicó de manera directa.
La compra de las despensas provocó de hecho que en 2018 un grupo de legisladores del Partido Acción Nacional (PAN) presentaran una denuncia ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) en contra del gobernador de Coahuila, a quien acusaban de entregar despensas como una estrategia para favorecer a los candidatos priístas en las elecciones municipales.
En ese momento Jorge López Martín, el entonces diputado de este partido, informó que, a tan solo unas horas de que Riquelme Solís tomara posesión del cargo, el gobernador solicitó un crédito de cerca de mil millones de pesos, de los cuales, 600 millones ya habían sido prometidos a la compra de despensas que serían entregadas a cambio de votos para el Partido Revolucionario Industrial (PRI).