CDMX a 6 de abril, 2023.- El uso excesivo de los teléfonos celulares ha cambiado nuestro cerebro. Cuanto más útiles son nuestros teléfonos, más los usamos, lo que crea nuevas vías neuronales que nos conducen a buscar nuestros celulares para hacer cualquier tarea.
Los adultos en Estados Unidos revisan sus celulares 344 veces al día en promedio. Este uso excesivo de los teléfonos celulares puede tener un impacto negativo en nuestra memoria y capacidad de atención.
Los investigadores creen que, al confiar la información más importante a un dispositivo, las memorias de los participantes se liberaron para almacenar información de bajo valor.
Además, el uso excesivo de los teléfonos celulares puede afectar nuestra capacidad para concentrarnos y procesar información.
Un estudio encontró que los participantes que hablaban o enviaban mensajes de texto por teléfono durante una tarea tenían un rendimiento casi tan malo como los participantes que estaban bajo los efectos del alcohol.
Es importante tener en cuenta que el uso de los teléfonos celulares no es necesariamente malo en sí mismo, pero el uso excesivo puede tener consecuencias negativas en nuestro cerebro.
Para reducir la necesidad de buscar el teléfono celular, se recomienda limitar el tiempo de uso y apagar el teléfono en momentos en que no se necesita.