CDMX a 25 de abril, 2024.- En un paso audaz hacia el futuro, la Cámara de Diputados de México ha aprobado una reforma significativa que designa las actividades en el espacio ultraterrestre, incluyendo la Luna y otros cuerpos celestes, como áreas prioritarias para el desarrollo nacional. Con 18 votos a favor, cinco en contra y una abstención, el proyecto recibió el respaldo necesario para avanzar en el proceso legislativo.
Esta modificación a los artículos 28 y 73 de la Constitución no solo amplía el campo de acción para la política espacial de México, sino que también coloca al país en una posición privilegiada para participar activamente en la economía espacial global, que incluye desde comunicaciones satelitales hasta minería espacial.
Durante los debates, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera enfatizó la importancia de esta reforma para el desarrollo científico y tecnológico de México. Recordó la reciente participación de 250 jóvenes en el Proyecto Colmena, una iniciativa que marca la primera incursión de México en la exploración del espacio profundo con tecnología nacional. “Esta reforma rompe las cadenas que impedían nuestra plena participación en la era espacial”, declaró Rivera.
La reforma también faculta al Congreso de la Unión para legislar sobre esta materia, lo que implica un marco legal más robusto para las futuras actividades espaciales. Cristóbal Arias Solís, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, señaló que las actividades espaciales son cruciales para varios sectores, incluyendo la defensa nacional y la investigación científica.
Sin embargo, no todos los senadores están convencidos. José Alfredo Botello Montes, del PAN, expresó preocupaciones sobre cómo estas reformas podrían interactuar con los principios del Tratado sobre el Espacio Ultraterrestre. Claudia Ruiz Massieu Salinas sugirió devolver la minuta a la Cámara de Diputados para una revisión más detallada de la redacción, preocupada por posibles efectos negativos no intencionados.
Por otro lado, la industria aeroespacial mexicana ve esto como una oportunidad dorada. Benjamín Najar Lomelí, de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial, destacó que esta reforma podría resultar en la creación de más de 60,000 empleos y consolidar una base científica y tecnológica autónoma en el país.
Expertos legales, como Luis Antonio López Velarde Sandoval de la UNAM, afirman que esta reforma es coherente con los tratados internacionales y esencial para el desarrollo independiente de México en tecnología espacial. “Sin esta base constitucional, México continuaría dependiendo tecnológicamente de otras naciones”, comentó.