CDMX a 6 de septiembre, 2024.- Luis Donaldo Colosio Riojas, senador de Movimiento Ciudadano, ha alzado la voz en contra de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. A través de sus redes sociales y durante la sesión del Senado en el Antiguo Palacio de Xicoténcatl, Colosio Riojas denunció presiones para aprobar dicha reforma, afirmando que no se trata de una verdadera mejora para el sistema judicial, sino de una «venganza».
El senador de Movimiento Ciudadano destacó que hay un ambiente de tensión en torno a la votación de la reforma judicial, con muchas personas preocupadas por la dirección que podría tomar el Poder Judicial si se aprueba tal como está planteada por Morena. “Hay mucha, mucha presión, mucha gente que está preocupada», señaló Colosio, subrayando que su bancada votará en contra de la propuesta.
Colosio enfatizó que, aunque reconoce la necesidad de una reforma al Poder Judicial, la versión presentada por el partido en el poder no es la solución. «¿Es necesaria una reforma judicial? Claro que sí, pero no así», añadió.
Las declaraciones del senador se dieron en un contexto de creciente especulación sobre el voto de la oposición. La sesión ordinaria de este jueves, realizada en el Antiguo Palacio de Xicoténcatl debido a protestas de trabajadores del Poder Judicial, estuvo marcada por rumores sobre presuntas amenazas de Morena hacia los senadores opositores para obtener la mayoría calificada y avalar la reforma.
El descontento de trabajadores del Poder Judicial, quienes también se manifestaron durante la sesión, refleja la preocupación de muchos sectores sobre el impacto que podría tener la reforma en la independencia y el equilibrio de poderes en el país.
Colosio Riojas reafirmó que su partido, Movimiento Ciudadano, no apoyará una reforma que considera punitiva y que, según él, responde más a un interés político que a la búsqueda de justicia. “Esta reforma es más un instrumento de venganza que una propuesta para mejorar el sistema judicial», concluyó.
Con la votación en el horizonte, la presión sobre los legisladores continúa aumentando, mientras las voces en contra de la reforma se hacen cada vez más fuertes.